Verano

Cuando acaba de culminar un año lleno de retos y desafíos debido a la pandemia, miles de padres de familia están en búsqueda de novedosas alternativas que permitan que sus hijos puedan entretenerse, aprender y explotar toda su creatividad de una manera divertida bajo esta nueva normalidad.

Para Frida Melgar, directora académica de Educación Continua de la escuela de educación superior Toulouse Lautrec (Perú), promover la creatividad en los escolares durante esta coyuntura es primordial para el desarrollo personal porque ayuda a reforzar la autoestima, autonomía y seguridad del estudiante. Según explica la especialista, las actividades enfocadas en explorar la creatividad son una excelente opción.

Por ello, Melgar brinda cuatro recomendaciones para ayudar a potenciar la creatividad de niños y jóvenes sin salir de casa:

Fomenta la curiosidad por el arte. El proceso de aprendizaje debe ser una experiencia motivadora, y la función de los padres es brindarles espacios y herramientas para que puedan manifestar su creatividad en lo que más les guste. Las actividades como la música, danza, pintura, entre otros, se identifican como actividades que se hacen meramente por placer y en el tiempo libre, por lo que su motivación llega a potenciarse aún más, por lo tanto, su creatividad también.

Optar por talleres de innovación. Las vacaciones también son un buen momento para participar en distintas actividades útiles que salen de la rutina.. En la actualidad, gracias a los teléfonos inteligentes, existe una perfecta oportunidad para fotografiar a todo lo que les parezca interesante, lo cual ayuda a poner en marcha muchos procesos cognitivos. Es una manera de poner en práctica la perspectiva de observador, lo cual permite recoger información, aprender de otros, hacer mejores hipótesis, encontrar distintas alternativas, ser más objetivos y más, agrega la especialista.

El brainstorming siempre es una buena idea para innovar en soluciones. Según la especialidad, la lluvia de ideas representa siempre un reto muy divertido. “Buscar soluciones, sean reales o no, fomenta la libertad de expresión, y con ella, la imaginación. Es una manera divertida de buscar distintas soluciones sin aferrarse a una, además de ayudar a la imaginación de los menores, también ayuda a su seguridad, generando un espacio de libre expresión, donde toda idea, por más descabellada que sea, es válida”, comenta Melgar.