Aplausos

¡Viernes, por fin es viernes! Así se sienten los asistentes al grupo que lidera Cindy Cohn. Cada semana la psicomotricistapropone actividades pensadas para jóvenes que encuentran en su espacio la posibilidad de socializar, reunirse, compartir, hacer amigos, ya sea para ir al cine, caminar por la playa o festejar un cumpleaños.

“Este grupofue ideado para personas con discapacidad intelectual leve, de entre 18 y 30 años, empecé con dos y hoy son dos grupos de 10 y tengo lista de espera”, relata Cohn que dio a conocer su iniciativa vía whatsapp y minutos más tarde recibió un aluvión de llamadas.

“Mi celular no paró, literal cortaba una llamada y me entraba otra, o me llamaban dos a la vez”, recuerda la psicomotricista egresada de la UCU y Magíster en Educación Especial por la Universidad Complutense de Madrid. El éxito de su propuesta fue inmediato, tanto que ya no trabaja sola y contrató a tres coordinadores que la acompañan en las actividades.

En sus reuniones, estos jóvenes descubrieron un espacio para encontrarse con otros adultos, conversar qué les sucede y realizar actividades en conjunto. La planificación corre por cuenta de Cohn e incluye salidas, charlas, festejos. Vía whatsapp al inicio de cada semana, ella les indica qué harán y apenas se separan el viernes, algunos ya consultan cómo será el siguiente encuentro.

“Hoy es el cumpleaños de Juan, vinimos a festejarlo”, cuenta Pepe que acompaña con alegría a su amigo.

“Es importante para ellos anticiparles las cosas que sucederán”, remarca Cohn, que está certificada por la UCLA (Los Ángeles) para aplicar el programa PEERS de habilidades sociales para jóvenes con desafíos en el desarrollo.

El grado de autonomía de los jóvenes es importante, es lo que les permite sumarse a propuestas tan distintas como salir a tomar un helado y pasear por la rambla, ir a ver una película, frecuentar un bar y cantar en el karaoke o juntarse en la casa de uno de ellos que es DJ.

Con miras a los días que se avecinan, Lucía que viaja semanalmente desde Maldonado les advierte a sus compañeros que una vez que se instale la temporada de calor, ellos serán los que deberán viajar al Este. “Ni loca me vengo con días de calor para ir a la playa a Montevideo, si quieren verme, tendrán que ir hasta allá, yo viajé todo el año”, explicita.

En lo que va del año ya tuvieron tardes de cocina, de pintura y relax. “La mayoría de ellos se mueven solos, andan en ómnibus, trabajan, piden su Uber, etcétera”, remarca la profesional que, en algunos casos ha intercambiado información con los terapeutas de los asisitentes. “De hecho el psicólogo de uno de ellos me comentó que está mucho más expresivo desde que comenzó en el grupo”, dice con satisfacción.

Además de integrarse al grupo de reuniones, todos los asistentes realizan otras actividades y cuentan estudios de variado tipo.

Juan tiene aprobado el primer año de la técnicatura en recreación de UTU, Oscar trabaja como recepcionista, Serena y Lucía son maestras, Juan Martín estudió diseño gráfico en la UTU, Javier estudia en la Fundación Prointegra y es DJ. Fernando es oficinista, Lucía estudió auxiliar docente (aunque no ejerce) y Stephanie dirige una clínica depilación por electrólisis.

Con lista de espera para 2022, Cohn planifica nuevos grupos. La experiencia adquirida le permite saber qué actividades les exigen más y reportan más beneficios a cada uno de los jóvenes.
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