Publicidad

El prosecco, un vino espumoso italiano que podría "morir de éxito"

Compartir esta noticia
Éxito. El secreto del prosecco está en el tipo de uva blanca con tintes dorados. Foto: EFE.
GRA061 ROMA, 05/07/2015.- Fotografía facilitada por la Empresa vinícola Bisol de un racimo de uvas de prosecco. El prosecco, el vino espumoso italiano más conocido, ha conquistado con su frescura y delicadeza no solo las mesas de Italia sino las de todo el mundo y corre el riesgo de morir de éxito por no poder responder a la creciente demanda de botellas. EFE/Paolo Spigariol **SOLO USO EDITORIAL**
Paolo Spigariol/EFE

El símbolo de la enología italiana conquistó en EE.UU. y Reino Unido, lo que disparó la demanda. Algunos viñedos no dan abasto y algunas compañías están por agotar reservas.

El prosecco, el vino espumoso italiano más conocido, ha conquistado con su frescura y delicadeza no solo las mesas de Italia sino las de todo el mundo y corre el riesgo de morir de éxito por no poder responder a la creciente demanda.

Los habitantes del Veneto —región septentrional de la que procede el prosecco— beben el vino espumoso hace centenares de años para acompañar todo tipo de menús y a casi cualquier hora del día. Pero el prosecco ha traspasado fronteras y conquistado a los países anglosajones.

El presidente de la vinícola Bottega, Sandro Bottega, informó que su compañía «está agotando la producción y a punto de terminar las reservas», algo que, según dijo, «todos los productores están sufriendo». La situación es «una suerte y desgracia al mismo tiempo», evaluó.

Bottega achacó la problemática a un fuerte aumento de la demanda, sobre todo en Reino Unido —donde las exportaciones en número de botellas crecieron en un año más de 67%— y en EE.UU., donde el alza fue de casi 30%.

El empresario celebró que el espumoso «se haya convertido en un producto conocido por todos, símbolo de la enología italiana y se alce como el primer espumoso del mundo en número de botellas» pero abogó por restringir las exportaciones y hacerlo a mayores precios, para «limitar el mercado inglés y estadounidense».

«Deberíamos conseguir que no consuman el prosecco como si fuese Coca-Cola», opinó Bottega.

Ya la Antigua Roma apreciaba el aroma de las uvas cultivadas en la localidad de Prosecco nacidas en el viñedo de Glera, del que obtenían el vino «Puccino», el antepasado más remoto del espumoso. En el siglo XVIII los avances técnicos permitieron crear la «spumantizzazione» que consigue la textura espumosa del prosecco, tan apreciado hoy y que aún utiliza como secreto de su éxito el mismo tipo de uva blanca con tintes dorados.

A pesar de asegurar «no tener problemas para hacer frente a la creciente demanda», el presidente de la empresa Bisol, Gianluca Bisol, habló de un aumento de la misma en el orden del 20% en los últimos seis meses en su empresa y abogó por conceder «más autorizaciones» para cultivar en la zona delimitada del prosecco.

«Hay una señal fortísima de demanda mundial de prosecco que exige más viñedos. Ya muchas empresas han comenzado, nosotros también, a hacer frente a una de las demandas más elevadas en la historia del vino», apuntó.

Es la región de Veneto la originaria del distintivo de Denominación de Origen Controlada del que el prosecco goza desde 2009 y en la única que tiene esta denominación. En sus provincias de Treviso, Venecia, Vicenza, Padua y Belluno, más de 8.000 empresas producen los 200 millones de botellas de prosecco que se generan en Italia. 

El eterno femenino de una imaginativa pintora
Éxito. El secreto del prosecco está en el tipo de uva blanca con tintes dorados. Foto: EFE.

Negocios

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

italiavinosvitivinicultura

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad