NEGOCIOS

dIEGO FERREIRA

El avance de la tecnología, una mayor familiaridad con las herramientas digitales y, más recientemente, la pandemia, han dado un fuerte impulso a las subastas online. Uruguay también refleja esa tendencia con la llegada de un nuevo jugador: la plataforma Narvaezbid.

El servicio se presenta como la primera subasta online en tiempo real y apunta tanto a empresas como a particulares.

La compañía surge de la alianza en 2012 entre la firma argentina Narváez, con 30 años de experiencia en subastas tradicionales y con más de 100 clientes entre los que figuran Pepsico, Unilever, BASF, BBVA, Syngenta, entre otras grandes compañías, y el grupo brasileño Superbid, especializado en remates online. Como parte del plan de expansión, la rama argentina encara la llegada de la plataforma a Uruguay (Superbid está presente ya en Chile, Perú, Colombia, Bolivia, Ecuador y Brasil) y, para ello, contará con socios locales como Coldwell Banker (firma especializada en inmuebles) y el rematador Gardiol e hijos.

«Sabemos que Uruguay es un país muy afín a las subastas», destacó Fabián Narváez, presidente y fundador de la compañía, quien agregó que el objetivo es «replicar todos los productos» que Narvaezbid tiene en Argentina.

El abanico va desde la venta de automóviles (la principal rubro en Argentina con un 40% del negocio), maquinaria, chatarra a inmuebles y ganado, entre otros, detalló Juan Pablo Ardohain, director para las filiales hispánicas de Narvaezbid.

Narváez destacó la simplicidad de la plataforma online como una de sus fortalezas. Luego de evaluar los bienes a subastar por parte de los expertos de la compañía, se estima el monto a recuperar por el vendedor (la base se ubica en un 30% o 40% del valor de mercado). Después, la subasta se publica en la web con una fecha y hora determinada de cierre.

Los postores deben registrarse en la plataforma, cumplir con los requisitos del vendedor y depositar un seguro mínimo como garantía de oferta.

El sistema permite ofertar apenas se sube la subasta, durante las 24 horas y sin que el oferente deba limitarse a un día y horario específico. Además, a través suyo los extranjeros pueden ofertar y seguir la subasta.

Narvaezbid realizó el año pasado algunos eventos en Uruguay, pero la idea es que este año sean casi mensuales.

Narváez dijo que la afinidad entre Uruguay y Argentina es un aspecto importante dado que muchas empresas operan en ambos márgenes del Río de la Plata.

Según el empresario, la pandemia no afectó el negocio de la compañía. Al comparar 2020 con 2019, la operación argentina demostró un crecimiento en subastas realizadas (610 contra 550), lotes vendidos (9.400 y 7.200) y visitas al portal (44 millones y 34,5 millones). Los ingresos de la empresa fueron de US$ 34 millones (al cambio actual) el año pasado.

Esto se explica por el carácter cíclico y contracíclico del negocio de las subastas. «Cuando la economía crece las empresas renuevan por crecimiento, y cuando decrece venden para hacer caja, entonces, siempre estamos ahí para ayudar a las empresas en esos procesos», concluyó Ardohain.

La realidad de las subastas es cada vez más digital, remarcó Fabián Narváez, presidente y fundador de Narvaezbid. «En Brasil ya no va nadie al salón y en Argentina va menos gente», señaló. El empresario comentó que en otros tiempos los remates presenciales que organizaba su empresa reunían a entre 300 y 500 personas en un hotel, pero ya en los últimos años el 98,5% de las ventas se canaliza por la vía digital. Pese a ello, la empresa aún ofrecía antes de la pandemia la opción de subastar en sus salones, más que nada como alternativa para un público menos afín a la tecnología.

Narváez dijo que la plataforma tiene un nivel ventas en sus subastas de entre 95% y 98%. Los lotes que no se venden se ofrecen en otras subastas o se les busca comprador entre posibles interesados.