Bodega Garzón

El establecimiento fue premiado en la 19° edición de los premios Wine Star Awards de la revista estadounidense Wine Enthusiast.

El sueño del empresario argentino Alejandro Bulgheroni y su esposa Bettina se hizo realidad y su emprendimiento Bodega Garzón, ubicado en Maldonado, recibió un prestigioso reconocimiento internacional.

La destacada revista Wine Enthusiast, especializada en el sector vitivinícola, le otorgó el premio Mejor Bodega del Nuevo Mundo 2018, en el marco de la 19° edición del certamen Wine Star Awards.

El galardón obtenido es un hito para Uruguay, ya que la publicación es referente en el sector, cuenta con más de un millón de lectores en su edición online y 800.000 en la versión de papel. Cada año reconoce en 16 categorías diferentes, a consumidores, sommeliers, personas influyentes y empresas que han logrado un impacto positivo en la industria del vino contribuyendo a su desarrollo y crecimiento.

La iniciativa uruguaya fue nominada en la categoría Best New World Winery of the Year junto a otros cuatro destacadas empresas de Canadá (Cave Spring Cellars), Nueva Zelanda (Felton Road), Sudáfrica (L’Avenir) y Argentina (Trapiche).

La ubicación geográfica del establecimiento, a pocos kilómetros de Pueblo Garzón y próximo al océano, y el suelo donde fue construido el viñedo de más de mil parcelas, constituyen un ingrediente importante para la personalidad y carácter de los vinos de Bodega Garzón. Las uvas son cultivadas sobre roca de balasto, una alteración de la piedra de granito, por lo que los productos de Bodega Garzón cuentan con un equilibrado componente de minerales. Con una perfecta complejidad, frescura y acidez, características otorgadas por el clima templado de la zona que permiten una maduración ideal de la pulpa, la semilla y la cáscara de la fruta, se trata de productos únicos y fieles a su terruño.

Tras una inversión de US$85 millones, el establecimiento se inauguró en 2016. Para este año, ya se posicionó como la bodega uruguaya número uno en exportaciones,

El edificio de Bodega Garzón tiene 19.050 m² y fue construido siguiendo las rigurosas exigencias del United States Green Building Council, convirtiéndose en la primera bodega sustentable fuera de Norteamérica con certificación LEED (Leadership in Energy & Environmental Design) en toda sus instalaciones.

El cuidado de los recursos naturales es clave en el diseño escalonado del establecimiento, hecho en terrazas naturales sobre la sierra a 160 metros de altura sobre el nivel del mar, lo que permite utilizar el sistema de gravedad para el drenaje en las plantaciones, que utilizan además métodos y técnicas orgánicas. A su vez, la eficiencia de las instalaciones, que cuentan con plantación de flora autóctona en sus techos y madera certificada, permite optimizar la energía y al mismo tiempo generar energías eólica y fotovoltaica.

La bodega, a su vez, cuenta con una tecnología de avanzada, con tres sectores de fermentación y uno de crianza, recipientes de acero inoxidable, piletas de hormigón y cubas troncocónicas de roble, lo que permite expresar el carácter del terruño en los vinos que se producen bajo el asesoramiento profesional del enólogo italiano Alberto Antonini y su equipo de especialistas. Las uvas son cosechadas a mano y se realiza una especial selección de los racimos para garantizar que la fermentación se hará únicamente con las de mayor calidad.

«En 30 años que tengo en la industria no he visto nada así en el mundo. Es un honor trabajar con don Alejandro Bulgheroni y su familia, compartiendo un proyecto de esta envergadura con profesionales de primer nivel como Antonini y Mallmann», dijo Christian Wylie, gerente general de Bodega Garzón.

También Bodega Garzón se ha transformado en un centro de atracción turística por excelencia, que recibe casi 20.000 turistas cada año.
Asimismo, el emprendimiento cuenta con un restaurante a cargo del famoso chef argentino Francis Mallmann, y el exclusivo Club Privado The Garzón Club. Formar parte de esa prestigiosa agrupación permite acceder a una bodega con cavas para elaborar su propio vino, y hacer uso de un lujoso hotel con spa entre sierras y viñedos, así como del campo de golf.