ENTREVISTA

Las aerolíneas comerciales dejaron atrás el peor momento de su historia y, si bien aún tienen el lastre de rutas y aeropuertos restringidos
—especialmente en Asia—, se recuperó algo más de la mitad de la actividad de las terminales áreas en el mundo, según ACI (Consejo Internacional de Aeropuertos, en inglés). Pospandemia, también se va recomponiendo la conectividad en el Aeropuerto Internacional de Carrasco. En ese contexto, uno de los históricos operadores, Iberia, espera poder aumentar a seis sus frecuencias Montevideo-Madrid antes de que termine el año. Víctor Moneo, director de ventas de Iberia para América Latina, sostuvo que la recuperación se apoya en los turistas y en los reencuentros de familias. Esa última es «una característica diferencial» en Uruguay, destaca el ejecutivo. Los viajes de negocios, por ahora, están rezagados.

-¿En qué etapa de la recuperación está la aviación comercial?

-El sector de la aviación es uno de los que están más sometidos a cualquier vaivén, ya sea de carácter económico o de conflictos bélicos o pandemias. También es cierto que después somos de los que más rápidamente recuperamos la forma. Las compañías aéreas hemos ido tomando distintas decisiones a la hora de programar nuestra presencia en los mercados, basadas en la particularidad de la coyuntura. Iberia había decidido desde el inicio que tan pronto como los países fuesen abriendo sus puertas tenía que ser la primera que allí estuviera. Y así hemos actuado. De hecho, fue así. Ya a fines de mayo y primeros días de junio de 2020 comenzamos a operar de manera sostenida a un buen número de países, a todos aquellos donde podíamos volar.

-¿Cuál es el nivel de recuperación de la actividad afectada por la pandemia?

-Estamos incrementando nuestros vuelos en todos los países de América Latina y al día de hoy tenemos recuperada toda nuestra oferta en términos de países a los que operamos y de ciudades con las que conectamos desde Madrid. Aun así, todavía no es el 100% de los asientos que teníamos previo a la pandemia, pero ya estamos en porcentajes en el entorno de un 80%. En esa línea, se recuperan los dos vuelos diarios con Argentina, Colombia y México y uno con Chile, Perú y Brasil. Para la alta temporada europea, en julio y agosto, estaremos con 220 vuelos semanales entre España y América Latina. En paralelo, ya hemos recuperado el 100% de vuelos en Europa.

La recuperación todavía no es del 100% de los asientos que teníamos previo a la pandemia, pero ya estamos en porcentajes en el entorno de un 80%"

Víctor MoneoDirector de ventas de Iberia para América Latina

-En octubre del año pasado confirmaron cinco frecuencias semanales a Uruguay. ¿Se recuperará la sexta frecuencia, que existía previo a la pandemia?

-No nos queremos apurar. Atendemos a lo que nos va marcando la demanda. Estamos fuertemente enfocados en recuperar las frecuencias en el continente americano, pero vamos observando de acuerdo a los vuelos, al número de asientos y a la demanda, qué ponemos en cada mercado. Es un monitoreo que tenemos que hacer casi que a diario.

-¿Y qué dice ese monitoreo?

-Que la demanda está tirando positivamente. Como respuesta a esa demanda, tratamos de poner más oferta. Es el caso concreto de Uruguay. La programación que tenemos entre Madrid y Montevideo se parece cada vez más a 2019, ubicándose en la media de América Latina. Cuando vemos que el avión va llegando a un porcentaje de ocupación razonable es cuando nos animamos a poner el siguiente vuelo. En Uruguay volvimos con tres después de la pandemia, pasamos a cuatro, ahora estamos con cinco y nuestra intención es poder recuperar lo que teníamos en 2019, cuando llegamos a tener seis vuelos semanales. Ojalá los fundamentos que hacen que nuestra decisión sea ir poniendo más oferta sigan funcionando bien como hasta ahora. Nuestra percepción es que a lo largo de este año 2022 vamos a recuperar ese sexto vuelo.

A diferencia de otros mercados, con Uruguay existe un tráfico mixto, que enriquece el destino. Tenemos tráfico turístico, pero también tde negocios. Y, además, se añade el tráfico étnico, que es entre familias que viven a un lado y al otro del Atlántico y que con cierta frecuencia cruzan para encontrarse con los suyos"

Víctor MoneoDirector de Ventas de Iberia para América Latina

-¿Hay alguna característica especial en la ruta Montevideo-Madrid?

-Uruguay es un destino y un origen muy importante. Lo ha venido siendo los últimos años, donde el comportamiento que ha tenido el país, para nosotros, ha sido extraordinario. A diferencia de otros mercados, con Uruguay existe un tráfico mixto, que enriquece el destino. Tenemos por supuesto tráfico turístico, pero también tráfico de negocios. Y, además, se añade el tráfico étnico, como lo llamamos, que es entre familias que viven a un lado y al otro del Atlántico y que con cierta frecuencia cruzan para encontrarse con los suyos. Ese mix de tráfico también hace que el volumen de demanda se vaya recuperando un poco más.

-El tráfico de negocios es el que presenta mayor rezago…

-Es cierto que el tráfico de negocios todavía sigue a un ritmo un poco lento. Pero los otros dos públicos ya están funcionando muy bien. Tanto los viajes de familia como los de turismo están casi al 100% del período prepandemia. Donde se avance en la esperada recuperación del segmento de negocios, estaremos en condiciones de recuperar el vuelo que resta.

-Esa dificultad para los viajes de negocios, ¿es una característica general en la industria en la actual coyuntura?

-El segmento corporativo está tardando en volver. No es solo con Uruguay. Y no creemos que en 2022 se recupere al 100% ese tipo de tráfico para nuestras frecuencias en la región. Estimamos que será a lo largo de 2023 donde ese sector en concreto pueda ya obtener la misma categoría, el mismo rango que tenía en 2019.

-Madrid sigue siendo la puerta de entrada a Europa para los uruguayos?

-Totalmente, pero más de un tercio de todos los pasajeros provenientes de Montevideo siguen camino hacia otras ciudades o países. Previo a la pandemia, también Madrid era un puente para quienes tenían como destino a China u otros países de Asia-Pacífico. Llamaba la atención el porcentaje de viajeros uruguayos que hacían esa ruta, respecto de otras nacionalidades. Pero ahora, por motivos de la pandemia, Asia redujo muchísimo su capacidad aérea. Todas las compañías hemos dejado en un mínimo las operaciones.

Líneas a Asia están mínimos por la pandemia y la guerra en Ucrania"

Victor MoneoDirector de Ventas de Iberia para América Latina

-A lo que ahora se suma el corte de rutas, consecuencia de laguerra en Ucrania…

-Es así, la imposibilidad de viajar sobre el espacio aéreo ruso llevó a una reducción notoria de esas rutas. Una recuperación que de por sí era muy lenta por la pandemia, ahora se frenó debido a la guerra.

-¿Qué hizo Iberia en lo peor de la pandemia?

-Los meses de 2020 en los cuales las fronteras estuvieron cerradas, los aviones de Iberia siguieron volando; no podíamos transportar pasajeros de manera regular, pero sí seguimos trabajando en el transporte de material sanitario. En aquel momento, China era uno de los pocos países productores de material sanitario donde se podía comprar desde respiradores hasta mascarillas. Después, empezaron a llegar las vacunas y nos dedicamos a transportarlas, desde la India, España o el Reino Unido, con destino a América Latina. Y, en paralelo, llegaron los vuelos de repatriación; hicimos 70 en total, llevando personas que habían quedado varadas en diferentes destinos a causa de la pandemia. Alguno de esos vuelos fue a Uruguay. Y trajimos españoles que querían volver a casa. Hubo un rol que cumplir en ese período, encontramos que podíamos seguir funcionando y hacer algo realmente útil para la sociedad. Algo vital, en momentos de gran incertidumbre.