NEGOCIOS
La fortuna del presidente estadounidense Donald Trump ha tenido muchas más fuentes de ingresos más allá de su famosa cadena de hoteles, sus edificios repartidos por el mundo o sus campos de golf.
Antes de iniciar su sorpresiva aventura política en 2015 con su candidatura a la presidencia, el en ese entonces magnate y estrella de realities ya recibía millones debido a las licencias otorgadas a 19 compañías para vender productos bajo su nombre.
Si bien los negocios del presidente están principalmente relacionados con los sectores inmobiliario y hotelero, el apellido Trump está asociado a otros productos. Botellas de vino, desodorantes, perfumes, hamburguesas, una línea de vestuario y decoración, son solo algunos de los variados y excéntricos artículos que se comercializaban bajo el alero de la marca Trump, la que no siempre resultó beneficiosa para aumentar las ventas.
Reconocidos fueron los fracasos de su propia versión de Monopoly «Trump: The Game» y las botellas de agua mineral «Trump Ice», las que nunca lograron despertar el interés de los consumidores.
Sin embargo, las bajas ventas no han sido la única razón por la que más de una decena de firmas han decidido terminar su alianza con el republicano, ya que desde que asumiera la presidencia de EE.UU. varias compañías han decidido tomar distancia del apellido Trump a causa de su visión política conservadora.
De hecho, a poco más de un año de llegar al Salón Oval, son solo dos empresas —la panameña HomeStudio y la turca Dorya— las que continúan vendiendo la línea de decoración del empresario, mientras que el resto de los productos aún pueden conseguirse en portales como eBay y Amazon, en donde se venden como excentricidades.