Ese eterno encanto de la cocina casera

19/07/2015, 04:07

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Con una vasta experiencia como chef en Uruguay —en restaurantes como La Huella y La Caracola— y en Europa, el chef Bruno Spinelli desembarcó hace poco más de un año con su emprendimiento propio, Sandoval, en Ciudad Vieja.

"Yo siempre estuve haciendo temporadas y en Montevideo generalmente estaba de vacaciones y me dedicaba a recorrer lugares de gastronomía. Después vino el momento de tener mi proyecto propio", dice Spinelli, cocinero de la escuela de Francis Mallman (trabajó cinco años en su restaurante Los Negros), y también con fuerte influencia de la cocina italiana.

Spinelli y su socio Federico Silva, quien fue asistente de Mario Benedetti, han estado vinculados desde hace años a cuestiones artísticas. Por eso, cuando encontraron el local de Bartolomé Mitre y 25 de Mayo no dudaron en que era el ideal: es un gran espacio dividido en dos, la mitad manejado por el grupo de teatro Platea Sur y la otra ocupada por su propuesta, que definen como almuerzos, eventos y catering. Es que cuando cierra Sandoval (a las 16 horas) comienzan a preparar el evento de ese día (cumpleaños, reuniones empresariales, espectáculos, entre otros).

El restaurante está abierto a mediodía y ofrecen un menú ejecutivo ($ 320). La carta, de cocina internacional, es variada. Entre las entradas se destacan la sopa del día ($ 110), ensalada de la casa (mix de verdes, verduras salteadas, queso de cabra, $ 150) y pizzeta (tostada con verduras asadas y queso de cabra $ 170).

Entre los principales, hay dos platos característicos: el bife ancho con papa escrachada ($ 325) y los ravioles de masa de remolacha rellenos de calabacín, con manteca de salvia ($ 275). Entre las demás opciones se destacan las pechugas de pollo con verduras asadas ($ 290) y el pescado fresco con boniato aplastado ($310).

Para la hora del postre, los más pedidos son la tarteleta de chocolate con crema de limón ($ 150) y el crumble de manzana con helado de crema y almendras rotas ($ 150).