Deben de creer que somos idiotas. O que con cuatro o cinco saliditas en la tele con cara de Robespierre alcanza y sobra. O deben creer que con una pose de autoridad y repartiendo algún que otro chocolate está todo OK.

O algo aún peor, que los líos en los que están metidos hasta las manos no impactarán demasiado porque a la gente le importa un pepino todo eso. Hasta lo del vice ya ni mueve a risa, es más, ya se ingresó en la zona en que nos da vergüenza a todos como uruguayos.

¿Y saben una cosa? Quizás todo eso sea cierto, —quizás solo quizás— porque si la economía sigue dando respiros (a pesar del desempleo) entonces se colará nuevamente la misma barra y acá podría no haber alternancia democrática, lo que —para muchos— sería una obscenidad si el pueblo así lo decidiera. Pero sería la voz del pueblo. Punto. Y con Pepe empujando, ta bravo pelear contra un mito viviente. No es moquito de pavo.

Lo que se le debe reprochar a este gobierno es que no había luminarias, intelligentsia, capos en ciertos temas, tipos que la rompieran, nada. ¡Todo era sanata! Todo fue sucundún con chequendengue. Por eso, lo relajarán, no lo votará ni la madre pero el ministro Danilo Astori —en medio de toda esa barakutanga alucinógena— es el Mesías. Otro que un día habría que hacerle un monumento es a Miguel Brechner por la paciencia, por saber que el Plan Ceibal solito (y desconectado de la turba) educa más que mucho necio.

Vengo de descubrir a la subsecretaria de Salud Cristina Lustemberg, un lujito que recién ahora la ponen a rodar y que cuando habla hay que parar lo oreja porque no dice lugares comunes. Porque eso hacen la mayoría de los funcionarios: nos aburren con el manual de la frase hecha.

¡Ah! Y los que mandaron al paredón como Mir, Filgueiras, Papadopulos, Tornaría toda gente que sabía de educación. Una locura. ¡Como si el país tuviera un proyecto en educación que fuera revolucionario! Divino Netto pero Varela se revuelca en su tumba pateando la tapa para salir a bramar.

¿Ramón Méndez en la Intendencia capitalina? Vamos chicos, todos sabemos que es una mente brillante y que alguien lo cepilló. ¿Sobran estos tipos?

Como soy docente universitario —hace décadas— hago este ejercicio: primero, recuerde usted más de siete ministros (verá que no puede, algunos son seres casi espías que no los conoce nadie). Segundo, a los que recuerde, póngales nota del uno al diez. Cuando lo haga, verá que este gabinete no tiene a nadie con: muy bueno sobresaliente, algunos pocos buenos, todo medio regular para abajo y mucho aplazado (el promedio es regular para abajo).

Ahora haga ese ejercicio con los legisladores y verá que recuerda a poquititos. Es más, casi seguro que usted no recuerda al segundo senador de la lista que usted votó y nunca sabrá quién fue el segundo diputado de esa lista. O sea, usted también tiene un poco de culpa por no prestar toda la atención que requieren estos asuntos. Sorry.

Y seguro que están ladrando los progre diciendo que con la oposición pasa lo mismo. Es muy probable, pero a ellos los votaron para controlar no para gobernar, con lo que la tarea —en términos de exigencia— tiene otra densidad.

¿Es entonces éste el mejor Frente Amplio en el gobierno? No, éste es el gobierno que el Frente Amplio le dejó hacer al presidente, que no será Kissinger pero que de seguro hubiera querido tener otros jugadores en la cancha para hacer otras cosas.

Por eso sale Tabaré cada vez que puede, rema solo, en una canoa con Roballito y Toma soplando, pero no demasiado, no sea cosa que se les arrugue el traje. Porque ese es el otro problemita del gobierno, más de uno se creyó príncipe y no sabe que cualquier día te viene el cedulón con el desalojo y volvés al llano sin imaginarte el futuro. Un jerarca, no importa quién, en una conversación me habló del próximo presupuesto nacional, dando por hecho que ganarían. , no dije nada y pensé: eso mismo creía yo hace muchos años... La vida es una novela que se escribe locamente. Ya lo deberían de saber. No lo saben. No lo saben. No lo saben.

CABEZA DE TURCO