HISTORIA DE LA VIOLENCIA

Mercedes Estramil

Edouard Louis nació en 1992 en Hallencourt (Francia) y se convirtió en éxito de ventas hipertraducido con tres novelas autobiográficas: Para acabar con Eddy Bellegueule (2014) Historia de la violencia (2016) y Quién mató a mi padre (2018). Las dos primeras provocaron admiración exagerada —quizá por la juventud del autor y la audacia temática, aunque esos elementos juntos son bastante comunes— pero también mucha polémica, y detractores que lo vieron como un oportunista capaz de hacer pompas de jabón con un puñado de mentiras. En definitiva lo que importa a la literatura es si esas mentiras están bien contadas o no.

Nacido como Eddy Bellegueule en un pequeño pueblo de provincias, en una familia pobre, con un padre alcohólico y una madre abnegada, el autor estudió Historia y Sociología, se cambió el nombre, no ocultó su homosexualidad, e hizo la exhibición más llamativa de todas: escribir de todo eso sin subterfugios narrativos ni atenuantes, declarando públicamente su odio hacia esa sociedad opresiva. Si no hubiera hecho dinero u obtenido fama mediática con tanto material explosivo quizá la valoración hubiese sido más sosegada, pero esas dos variables una vez que están son imborrables (al menos por un tiempo). En niveles análogos de exposición se deslizaron —aunque con resultados diversos— Virginie Despentes, Catherine Millet o Charlotte Roche.

Historia de la violencia es la narración en primera persona de un robo, seguido de intento de asesinato y violación que Édouard Louis habría sufrido por parte de un amante ocasional y de origen árabe que llevó a su apartamento un 25 de diciembre. En un procedimiento elíptico, envolvente, Louis desarrolla la rememoración de ese episodio (real o no; ese dictamen quedó a manos de la justicia), dosificando la información hasta verterla toda, en una trama donde participan también amigos del protagonista, su hermana (parte activa de la narración), su cuñado, personal médico y policial. Si bien hay un alto componente de victimización en el relato, Louis consigue crear una atmósfera y trascender lo anecdótico. Hay que destacar además la complejidad emocional que sabe poner en juego —quizá derivada del propio origen de esta autoficción— y el zoom con que amplía el drama de su personaje a un marco social de muchas violencias, donde interviene la pobreza, la xenofobia, el racismo, y en menor medida la homofobia. No es una novela “magistral” como firman en la contratapa, pero tampoco es una novela vulgar.

HISTORIA DE LA VIOLENCIA, de Édouard Louis. Salamandra, 2018. Tr. de José Manuel Fajardo. Barcelona, 187 págs. Distribuye Gussi.