Publicidad

Tres décadas de trabajo por recuperar la música antigua

Compartir esta noticia
Cristina García Banegas. Foto: Fraqncisco Flores
Archivo El Pais

Hoy en el Mapi, Cristina García Banegas celebra 30 años de De Profundis.

Esta tarde, a las 19.30, en el Museo de Arte Precolombino e Indígena (Mapi), habrá un concierto y un brindis, en el que se festejan los 30 años de la agrupación musical De Profundis. A su vez, también está cumpliendo tres décadas de vida otro emprendimiento paralelo, también bajo dirección de la organista Cristina García Banegas: el Festival Internacional de Órgano.

"Que cumpla 30 años este tipo de emprendimiento cultural de carácter independiente es algo extraordinario para nuestro país: tres décadas para investigar, recrear y pautar en grabaciones tanta literatura musical prácticamente desconocida. Por otro lado, la visita de tantos organistas del mundo que han compartido su arte con tan nutrida audiencia, es otro motivo para festejar", contó a El País García Banegas, cuyo nombre ha trascendido fronteras dado sus trabajos de recuperación de la música antigua.

La labor de esta destacada organista se ha desarrollado en más de un frente. Por un lado, una tarea de investigación, que la ha llevado a recorrer instituciones latinoamericanas donde encontrar, recuperar y volver a convertir en música antiguas y valiosas partituras, muchas de las cuales luego han sido ejecutadas en Europa por prestigiosas agrupaciones. En forma paralela, García Banegas ha fomentado el estudio del órgano en Uruguay, así como la recuperación de los antiguos órganos de iglesias, así como muchos otros instrumentos antiguos. "Me da alegría saber que actualmente tenemos organistas ocupando puestos remunerados en diferentes iglesias. Lo esencial es que la tradición de este arte no muera, que el rey de los instrumentos siga cantando a través del tiempo, y no se extinga por falta de interés, desconocimiento, o de presupuesto para retribuir a los artistas", explica.

En ese aspecto, la directora de De Profundis observa que se ha ido dando un crecimiento entre la institución que dirige, y las nuevas generaciones que se han sumado a ella. "Una queda tan impresionada: ellos tienen además su propio lenguaje, siempre al servicio de una notoria improvisación estilística, un prodigio, también como ocurrió con el jazz. Pensemos que no siempre se cantan o tocan melodías amables, por decirlo así, sino que el contrapunto está presente y alerta en todas sus consecuencias: glosándolo, ornamentándolo", analiza la especialista en la materia.

Pero esta tenaz gestora musical señala lo que se ha hecho en estas tres décadas, pero también lo que falta por hacer. "Los órganos están emplazados en las iglesias: lamentablemente aún no tenemos un instrumento tubular en auditorios, como ocurre en el mundo entero. Este detalle no es menor, al contrario. Tendríamos que poblar a muchas iglesias y salas de teatro con instrumentos adecuados al tamaño de cada recinto, y esto se puede fabricar en nuestro país y en países vecinos. También debemos estar atentos a la enorme oferta de venta de órganos tubulares pertenecientes a iglesias (que cambian por nuevos instrumentos, o que cierran) y por particulares que poseen este tipo de órganos en sus hogares o teatros".

Es que la ejecución de música antigua demanda instrumentos muchas veces sofisticados, muy diversos en forma y uso. En ese aspecto, García Banegas ha luchado por que en este país haya buen número y variedad de esos instrumentos sofisticados, trabajando para la importación de los mismos, su cuidado y mantenimiento. "Actualmente hay buen número de estos tipos de instrumentos. A nivel de instrumentos de tecla no podemos quejarnos, pero necesitamos más cuerdas y sus futuros ejecutantes: arpas doppias, arpas ibéricas, violines, violas, violonchellos, contrabajos y toda la familia de Violas de Gamba. Precisamos una gran grama de instrumentos de viento: Cornetos, Sacabuches, Serpentones, Chirimías", reclama la artista, quien sin embargo no duda en afirmar. "El interés en Uruguay por lo que denominamos música antigua es impactantemente creciente. Esto me da felicidad, nos permite cultivarnos y seguir la actividad continua en coloquio con la actividad en varios continentes".

El eterno femenino de una imaginativa pintora
Cristina García Banegas. Foto: Fraqncisco Flores

MÚSICA

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad