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La ciencia más allá de Science y Nature

| América Latina aumentó su producción científica de 3,8% a 4,9% en 2010, según un informe de la Unesco.

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LA NACIÓN DE COSTA RICA

En América Latina y el Caribe ya se hace ciencia, y de la buena. Esta es una región donde la investigación ha crecido significativamente en los últimos años. Según el informe de la Unesco sobre la ciencia de 2010, la región pasó de tener un 3,8% a 4,9% en cuanto a producción científica. Ese porcentaje corresponde al número de publicaciones registradas en el Science Citation Index (SCI), indicador que se utiliza para medir cuán prolífico es un país e incluye revistas tan prestigiosas como Science y Nature. Sin embargo, no toda la investigación que se genera en América Latina y el Caribe se ve reflejada en el índice SCI.

Jorge Grandi, director regional de Ciencia para América Latina y el Caribe de la Unesco, conversó sobre este tema y el plan que promueve la organización para articular mejor el esfuerzo científico que se realiza en este continente.

-La mayoría de los científicos que publican en las revistas especializadas Science y Nature son europeos y estadounidenses. ¿Es esto un reflejo de la realidad?

-Evidentemente, esas son revistas que dan ciertos indicios de cómo está el nivel de creatividad, pero no reflejan por completo lo que pasa en el mundo. No podemos vivir en función de esas revistas. Pienso que América Latina y el Caribe deben vivir en función de las necesidades cotidianas de su población. La región ha avanzado muchísimo en conocimiento científico y en la cantidad de investigadores por millón de personas. Hemos crecido en el porcentaje del producto interno bruto (PIB) destinado a la ciencia, pero seguimos siendo una de las regiones más desiguales. Eso es algo para que los investigadores tomen conciencia. Los temas de ciencia deben estar articulados con la erradicación de la pobreza y la inclusión social. Aquí tenemos otras urgencias como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y las enfermedades emergentes.

-¿Puede la ciencia ayudar a gestionar esas urgencias?

-Precisamente, estamos trabajando en un plan estratégico a mediano plazo para estrechar la cooperación sur-sur, sin olvidarse de la cooperación con el norte. La idea es aprobarlo a finales de 2011 y, por esa razón, estamos en un proceso de validación donde Unesco consulta a los países y otras comisiones. El plan tiene cinco pilares. El primero es una plataforma de indicadores en ciencia y tecnología que se llama Spin. El segundo pilar es un sitio web que se llama Nexus, el cual nació para unir a investigadores, laboratorios y universidades alrededor de la solución a un problema muy concreto. Para financiar la movilidad de los científicos está el tercer pilar, que consiste en crear un instrumento financiero que brinde recursos de manera rápida para que los científicos se puedan articular a fin de resolver ese problema. Como punto cuatro está la escuela de verano para crear gestores de proyectos de ciencia y tecnología y esto consiste en capacitar a los científicos en administración de proyectos. Por último, se quiere crear un grupo de expertos en prospectiva. Tienen el trabajo más estratégico sobre hacia dónde debe ir la región.

-¿Ya se tienen identificados los temas que son prioritarios?

-El tema del agua es fundamental, lo mismo que el de desastres naturales, el cambio climático, la emergencia que nos imponen las nuevas tecnologías, las enfermedades emergentes... Esos son temas que podrían manejarse con otras agencias de Naciones Unidas. Por ejemplo, en temas de salud se puede trabajar en conjunto con la Organización Mundial de la Salud (OMS).

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