Remake argentina de éxito galo, un éxito de un uruguayo y una infantil

10/09/2016, 05:00

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Marcos Carnevale dirige a Oscar Martínez y Rodrigo de la Serna en Inseparables, la versión argentina de Amigos intocables. Además, se estrenó No respires, el film de suspenso dirigido por el uruguayo Fede Álvarez que lidera la taquilla en Estados Unidos. Y para los más chicos está la muy bien lograda Mi amigo el dragón, basada en la película de 1977.

Inseparables

Pasados apenas cinco años de la original francesa, que tan bien funcionó a nivel mundial -Uruguay incluido-, la pregunta que surge es: ¿por qué una versión argentina de Amigos intocables (Intouchables)? Razones económicas es la primera respuesta que surge al ver que Marcos Carnevale repitió casi escena por escena lo hecho por Olivier Nakache y Eric Toledano, que a su vez se basaron en la historia real de Philippe Pozzo di Borgo y el argelino Abdel Yasmin Sellou. El primero, un millonario que queda tetrapléjico tras un accidente andando a caballo; el segundo, el ex presidiario que se transformó en su cuidador sin ninguna experiencia para ganarse ese puesto, solo su naturalidad y no haber tratado jamás a su jefe con lástima o piedad. Habiendo hecho estos reparos, que parecerían conducir a una valoración negativa del film, decir que la remake funciona muy bien y atrapa aun habiendo visto la original francesa. Si se la vio, la comparación deja bien parada a la argentina; sino, se la disfruta como una historia que, si bien apela mucho a lo emotivo y cae en varios clichés y oposiciones básicas al enfrentar dos mundos diferentes, se sigue con interés y sin recibir golpes bajos. Gran responsabilidad tienen los enormes actores elegidos para los papeles originalmente interpretados por François Cluzet y Omar Sy: Oscar Martínez y Rodrigo de la Serna. El primero debe valerse solamente de su rostro y cuello para interpretar y lo hace formidablemente; al segundo le toca el típico chanta argentino y no cae en la caricatura pese a rozar muchas veces el límite. Una historia que funciona pese al exagerado subrayado musical y que tiene algún que otro mensaje que sirve para sobrellevar los sinsabores de la vida. Un dato más: se viene la versión americana con Bryan Cranston y Kevin Hart.

No respires

Tres jóvenes que roban casas gracias a los datos que tiene uno de ellos por tener su padre una empresa de seguridad, deciden dar el gran golpe y asaltar a un veterano de guerra que vive en una zona de casas abandonadas. Está ciego y tiene dinero recibido de la familia rica de la chica que atropelló y mató a su hija. Lo que parecía un robo fácil se complica porque la víctima está más preparada para defenderse de lo que se creía, transformándose en el cazador de la historia. La película está muy bien planteada y filmada, con efectiva creación de climas y momentos que dejan al borde del asiento. No es un film de sustos, aunque los tiene, sino de suspenso cautivante en un relato para nada previsible aunque tenga algún cliché. Fede Álvarez merece los elogios que está recibiendo.

Tres jóvenes se proponen robar a un ciego creyendo que es víctima fácil, pero...

Mi amigo el dragón

Basada en la película de 1977 que mezclaba animación con seres humanos, comienza como toda historia de Disney: un niño queda huérfano. Sus padres mueren en el accidente de tránsito en el bosque del que el pequeño Pete, de 5 años, se salva y es adoptado por un dragón. Seis años después, cuando la tala de árboles se acerca al hogar de los inusuales amigos, una guardabosques descubre la existencia del niño, y su cuñado la del dragón, al que quiere cazar. Una historia clásica, sencilla, con personajes adorables (el dragón es una especie de peluche gigante); ideal para niños pequeños. Los más grandes tendrán la oportunidad de ver cómo Robert Redford sigue vigente, como padre de la guardabosques que sabe que los dragones existen porque los ha visto. Para disfrutar en familia.