"Con esto tengo que armar algo”, pensó Karina Noriega cuando se dio cuenta del mucho y jugoso material que le habían dado sus años de cobertura farandulera en Punta del Este para revista Gente.Vio y vivió cosas que se pueden contar y otras que no, pero que son dignas de sacar a la luz. ¿Entonces por qué no ficcionarlas?

Vio y vivió cosas que se pueden contar y otras que no, pero que son dignas de sacar a la luz. ¿Entonces por qué no ficcionarlas? Así se fue gestando la idea de Punta del Este (Editorial Planeta), la primera novela de esta “periodista, guionista y un poco actriz” argentina, según ella misma se define. Como ex productora de MTV también fue testigo de cosas que alimentaron este libro en el que aparece el Lado B de las celebridades, ese costado oculto que a todos da curiosidad.

"En su momento no había pensado que a partir de eso iba a germinar en mí la idea de hacer un libro. Tomé apuntes de todas las cosas más divertidas que había vivido, de hecho reproduje diálogos, de modo encubierto y clandestino participé en algunas fiestas. Muchos no sabían que yo era periodista, entonces aproveché que era mi primera temporada y de ese modo me involucré e hice como un trabajo paralelo de la cobertura", recuerda de su primer verano puntaesteño. Advirtió con el tiempo que lo recogido era muy bueno, atrapante, tentador para la curiosidad de cualquier mortal.

"El mundo de las celebrities, el show-off y mostrar el Lado B siempre me interesó", destaca Karina y rescata lo mucho que influyó también su faceta como productora ejecutiva de MTV Latinoamérica. "Recuerdo que había salido un libro de un productor de MTV que mostraba la verdadera cocina del canal, cómo todo era una gran farsa. Eso fue un poco germen también".

"Cuando me puse a escribir no hubo vuelta atrás, ya había decidido sobre qué quería escribir. Fue algo catártico, no hubo casi reescrituras", señala al recordar las madrugadas en las que el libro se fue haciendo realidad. "Quería que fuera algo muy fresco, escrito de modo liviano, fácil de leer".

Destaca que es un libro que se puede leer en cualquier momento, lo que cuenta puede ocurrir en cualquier verano. "Hay dos maneras de acceder al libro", opina. Unos se quedarán con los paralelismos con los famosos, a otros los atrapará la historia del protagonista.

Así nació Javier Smith, el relacionista público que supo ser top y que en esta nueva temporada que le toca vivir en Punta del Este está decidido a recuperar el sitial de privilegio que alguna vez tuvo. Como entiende muy bien el juego, sabe que eso se logra en base a un gran chisme o gossip. Mientras busca cómo concretar su objetivo, recorre fiestas, frecuenta celebrities y habla de todos sin pelos en la lengua. Ah, y no se priva de los excesos. De esa manera, el lector va descubriendo el mentado Lado B del mundo de las celebridades, que dista bastante de la glamorosa imagen que muestran las revistas dedicadas al tema.

Punta del Este termina revelando un costado bastante patético de ese mundo. "Absolutamente", admite Karina, "y me hago cargo, es mi visión sobre cierta parte, obviamente que no hablo de todos. El libro tiene una mirada socarrona sobre la fama".

Es inevitable leer Punta del Este sin buscar paralelismos con la realidad, sin intentar adivinar quién será la modelo adolescente o el empresario fiestero. Máxime si tenemos en cuenta que el balneario en el que todo transcurre es uruguayo y los personajes que lo pueblan son bastante cercanos, aunque se trate de celebrities. Los vemos en la TV, espiamos su vida en las revistas y nos enteramos de sus cosas gracias a las redes sociales.

"La realidad obviamente que me inspiró y fue materia prima, pero después hay mucha fábula, y mucho interés por escribir y dejarme llevar", cuenta Karina y dice que no se anima a poner en porcentajes cuánto de realidad y cuánto de ficción hay en su novela. "Es bastante complicado, pero hay muchas anécdotas que fueron reales y solo yo las sé. Me divierte mucho utilizarlas, ficcionarlas, hay obviamente nombres cambiados", apunta.

Pero también hay de los otros, nombres reales. A veces solo basta el nombre para que sepamos quién es Charly o quién es Susana, y hay casos como Marcelo Tinelli que aparece con todas las letras. "Los que decidí nombrar son muy icónicos, conocemos casi todo de ellos. Me gustaba ponerlos para interactuar con otros personajes, que los centrales fueran más satélites de todos ellos, por ahí para destacar esta cosa más patética que yo veo en el mundo de algunas de las celebrities. Eso me servía como coyuntura y para mostrar de qué mundo estaba hablando", explica sobre el criterio empleado a la hora de nombrar o cambiar nombres.

Criterio que no deja de tener consecuencias porque le pasa que muchos famosos le preguntan si tal o cual personaje es él y otros más arriesgados la consultan sobre si los va a incluir en su próxima novela. "Y hay otros preocupados, algún relacionista público me ha dicho espero no ser el protagonista, te mato", señala entre risas.

¿No tiene miedo que la farándula se enoje? "No, la verdad que no porque hay historias solapadas, está ficcionado, no me meto con nadie en particular ni trato de arreglar sus vidas", dice. "En cuanto al ambiente en el que se mueven, era importante que alguien lo contara. Yo quería mostrar algo que es prejuicioso o raro para la literatura y además que revelara. En eso siempre soy un poco out-sider y me gusta, intento mostrar algo desconocido. Incluso en mis notas, cuando abordo un personaje trato de pasar más tiempo del necesario con él para sacar otras cosas. Creo que la realidad siempre está entre lo oculto y lo que uno elige mostrar, y es ahí donde me gusta inmiscuirme".

Karina es actualmente editora en revista Gente. Pero antes de eso o paralelamente fue muchas otras cosas: trabajó en un local de hamburguesas; estudió Comunicación; escribió en revista La Maga; colaboró con los suplementos Espectáculos y Sí del diario Clarín, y en las revistas Rolling Stone y Los Inrockuptibles; fue productora ejecutiva y guionista de MTV Latinoamérica; escribió Algodones de azúcar, cuentos breves; coescribió las películas independientes Olimpia (en la que actuó) y Palmera, e hizo radio.

¿Por qué Lady Malibú en Twitter? "En el primer corto que hice, mi personaje era una asesina serial que se llamaba Malibú. Con Emmanuel Horvilleur, de Illia Kuryaki, éramos parte de un escuadrón que quería matar a Susana Giménez", responde entre risas.

Cuando se le consulta si Punta del Este tendrá segunda parte, confiesa que se lo han pedido y es algo que la seduce. "Pero tampoco quiero repetirme. No sé si sería lo ideal".

En un párrafo de la novela se puede leer: "Detrás de las telas black out que recubrían uno de los restó más recomendados del mundo, se reían a carcajadas Carolina y Benjamín". Son Pampita y Vicuña cuando nadie imaginaba en qué terminarían. "Hoy están en un problemón total. ¡El escándalo del verano! Nunca calculé nada", concluye esta periodista-escritora confirmando que la realidad todavía puede alimentar mucha más ficción.

Karina Noriega es la autora de "punta del este"