Entrevista con Benjamin Lyster-Binns -Embajador del Reino Unido en Uruguay.

—¿Qué opinión le merece el resultado del referéndum?

—Es un resultado muy claro. Es una decisión definitiva. Ahora la responsabilidad es del gobierno para trabajar en este camino, que es largo. Porque realmente hoy nada cambia. Habría cambios en el futuro, pero hoy y mañana no. Depende de los cambios en la parte política del Reino Unido. David Cameron (primer ministro) quiere renunciar en septiembre, octubre. Es responsabilidad del partido que tiene la mayoría en el Parlamento de elegir un nuevo primer ministro. Y es este nuevo líder quien tiene la responsabilidad de encontrar el mejor modo para irnos de la Unión Europea.

—Pero en su opinión, ¿la decisión es buena o es mala para el Reino Unido?

—Realmente como embajador no tengo una opinión de si es buena o mala. Es una decisión para trabajar en un camino hacia el éxito del Reino Unido.

—¿Influyó en la decisión final la aparición de partidos populistas y de extrema derecha en Reino Unido y otras partes de Europa?

—No, pienso que no. En estas semanas ha habido muchas palabras y mucha emoción, propias de una campaña. Para mí es un momento para unirnos, para pensar cómo trabajar juntos, como equipo. Eso es muy británico: trabajar juntos para un compromiso porque queremos un futuro con mucha certeza y mucha estabilidad.

——Muchos defensores del Brexit han votado para contener el supuesto aumento de la inmigración en el país. ¿Usted considera que esto sumó votos en favor la salida del bloque?

—El asunto de la inmigración fue un tema muy importante en todo el debate. No hay que verlo solo en el contexto del referéndum, esto es un tema para toda la Unión Europea. Claro que hay una nueva etapa en el tema de la inmigración y tenemos que pensar cuál es la forma para decidir el futuro en este asunto. Realmente, necesitamos inmigración para muchos trabajos y apoyo en la economía.

—¿Qué consecuencias económicas y sociales puede ocasionar el Brexit?

—En este momento es muy difícil para decir. Se debe pasar por un proceso para decirlo. No es claro. Ninguno de los indicadores es claro en este momento. Hay muchos analistas y comentarios que tienen sus opiniones, que pronostican el futuro. Pero para mí es imposible decirlo. Vamos a ver.

—¿Cuánto repercute la decisión británica en Latinoamérica?

—Espero no mucho. Por ejemplo, acá en Uruguay hemos tenido una relación muy cercana a lo largo de la historia sin la Unión Europea. Espero que en el futuro, cuando terminemos todo el proceso, podamos ver más oportunidades de un país con una economía robusta, con mucho expertise en ciencia, creatividad y genética, que son las ventajas del Reino Unido. El tratado entre la Unión Europea y el Mercosur lo apoyamos. Y tenemos poco tiempo para promoverlo.

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