El mal comienzo del uruguayo es un claro contraste con el inicio demoledor y ganador del norteño.

El tenis esta semana ofrece variada gama de sensaciones. Para los uruguayos, por ejemplo, la desazón por una nueva derrota en primera ronda de Pablo Cuevas, justo en la zona del circuito en la que en los últimos años había cosechado buenos puntos, que es la gira sudamericana sobre polvo de ladrillo.

Es que el ATP 500 de Rio de Janeiro ha sido cruel con los favoritos, ya que en la misma jornada en la que el salteño culminaba su actuación en individuales, el local, Thomaz Bellucci lograba el mejor resultado de su carrera al vencer y eliminar al primer favorito y cinco del mundo, el japonés Kei Nishikori.

"Jugué uno de los peores partidos de mi vida", dijo el top cinco del ranking tras perder 6/4 y 6/3 ante el mejor jugador de Brasil.

Nishikori llegaba a Rio luego de disputar la final del torneo de Buenos Aires, donde perdió a manos de Alexandr Dolgopolov.

Ese mismo día también se despidió de Rio David Ferrer, vencido justamente 6/4 y 6/4 por el ucraniano, monarca argentino el fin de semana.

También se despidió el veterano y en pleno regreso Tommy Robredo, vencido 6/2 y 6/4 por Fabio Fognini, en una racha donde los mejores, cayeron y dejaron una imagen muy pobre.

Siguió en carrera Pablo Carreño Busta, ganador 6/3 y 6/2 ante Joao Souza, y compañero de dobles de Cuevas, con quien debutaba el miércoles por la noche ante Santiago González y David Marrero.

Sin embargo y en la misma jornada, la contracara de derrotas fue un nuevo regreso triunfal del argentino Juan Martín del Potro.

El tandilense, quien decidió no jugar la primera ronda de la Copa Davis para preparar su vuelta, se impuso por un doble 6/4 al sudafricano Kevin Anderson en Delray Beach, un retorno a todo tren, sin dudas.

Luego de este regreso, el actual 36 del mundo se las verá en esta jornada ante un tenista particular: Damir Dzumhur, el primer tenista bosnio (nació en Zarajevo hace 24 años) en la historia en participar de un torneo de Grand Slam y actualmente 79 del mundo.

Sensaciones diferentes. Para unos, la derrota, y para otros, la victoria.

FERNANDO TETES

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