No son buenos los síntomas que sufre el goleador violeta de la molestia muscular que sufrió el domingo ante Boston River y si bien hay optimismo, es difícil que juegue el fin de semana e incluso el siguiente en el trascendental choque con Nacional.

"No es bueno hacer una ecografía en las primeras 48 horas después de la lesión porque puede resultar falsos resultados. Por eso estamos coordinando una entre martes y miércoles, pero lo más probable es que tenga una microrrotura fibrilar (pequeño desgarro) en el psoas, el músculo flexor que va de la pierna al tronco". Gustavo Huertas, médico de Defensor Sporting, contó al programa Último al Arco (Sport 890) la situación sanitaria de Maximiliano Gómez, el goleador y la figura desnivelante del equipo que dirige Eduardo Acevedo.

Es un hecho que el domingo ante Wanderers (Parque Viera, hora 15.30) el centrodelantero no jugará. "Si no estamos 100% seguros que puede estar, no lo ponemos", dijo Huertas, quien advirtió que este tipo de lesión "se sigue día a día" y que el jugador durante la semana seguramente trabajará en forma diferenciada en virtud del cuadro clínico que presenta.

Por lo tanto, aun en el caso de que no se confirme la microrrotura fibrilar que se presume, al futbolista se lo preservará para el partido ante Nacional dentro de dos semanas, el cual se disputará en el Franzini y puede definir el Apertura. En caso de que la ecografía sí muestre la lesión temida, entonces difícilmente pueda estar ante los tricolores.

Gómez ya había presentado una sobrecarga muscular durante la semana y por eso había trabajado diferenciado. "Luego de hacerle los estudios clínicos decidimos que estaba apto para jugar el fin de semana, pero lamentablemente a los cinco minutos hizo un giro extraño al chocar con un rival y eso generó la lesión", contó Huertas.

defensor sporting