Desde hace un buen tiempo a esta parte, cualquiera haya sido integración de su cúpula directriz, la Conmebol se ha vuelto en una caja de sorpresas inefable.

Ahora, por ejemplo, ha decidido iniciar un juicio civil contra Eugenio Figueredo al considerarse "damnificada" por la gestión del dirigente preso en Uruguay como presidente del organismo rector del fútbol sudamericano.

Sí, está bien, pero... ¿la Conmebol sólo se siente "damnificada" por la presidencia de Figueredo, que tuvo una vigencia de 16 meses entre el 24 de abril de 2013 y el 8 de agosto de 2014, y no por la de Nicolás Leoz, que se extendió a lo largo de casi 27 años?

Parece un chiste, y sería para reirse, si no fuera porque empieza a haber señales de que esto puede llegar a ser para llorar: con otro paraguayo de presidente, parece que la cancha está flechada, bajo la amenaza de que lo que pasa afuera se refleje adentro; lo que futbolísticamente, sería muy grave.

DE CONTRAGOLPE