Wanderers y Palestino empataron 1-1. Alex Silva hizo un golazo en el primer tiempo y Burián fue clave con sus atajadas ante el asedio local en el complemento. Mirá los goles.

Bien, Wanderers. Bien, porque a los efectos de la tabla de posiciones hizo negocio, más allá de que no buscó ese objetivo jugando abiertamente para el empate, cerrándose atrás y pegándole para cualquier lado, sino que en todo momento lo hizo con ese estilo tradicional que le ha impuesto Alfredo Arias, y de que si no hubiese adolecido de dos imperfecciones que no pudo corregir a lo largo de todo el trámite, pudo haber ganado.

Es que para sacar un resultado favorable como visitante a nivel internacional, un equipo uruguayo -por lo que son las características generales de nuestro fútbol- debe cumplir con algunos requisitos básicos, elementales: 1) Tener un arquero que ataje todo, como lo hizo Burián en Santiago, donde tuvo no menos de cinco tapadas clave; 2) De mediocampo para atrás, jugar con orden y concentración, sin fallas; y 3) Aunque la iniciativa la tenga el local, como Palestino anoche, tenerlo a raya con la posibilidad, primero de “lastimarlo” y, una vez conseguido esto, liquidarlo de contraataque.

Pues bien. Es cierto, Wanderers intentó defenderse con la pelota, jugando, progresando en la cancha o, como lo hizo ya al comienzo de la segunda etapa, para conservar la ventaja que sacó con el golazo que metió Alex Silva a los 35’, yendo a presionar con dos, tres y hasta cuatro jugadores sobre la salida del fondo y la mediacancha contraria; pero Olivera tuvo una noche fatal para cerrar desde el lateral izquierdo hacia el centro de la retaguardia, y Mascia en el complemento -por características físicas- no cumplió la tarea que, con gran sacrificio, había desplegado Reymúndez al ir a todas y mantener a raya a la defensa locataria.
De los preceptos básicos de aquel “manual del cuadro uruguayo visitante”, quedó en pie uno: Burián tapó el peligro que se generó a espaldas de Olivera, también el que gestó Palestino con su prolija -aunque a veces liviana- insistencia atacante, y hasta el que el propio Wanderers permitió que se creara al carecer de precisión para desdoblarse.

Por eso, entonces, hay que quedarse con el resultado: un empate que vale mucho y que el equipo bohemio sacó jugando “a cara de perro”, o de “Cachorro” (Burián), y con sus armas.

Palestino: Melo; Carvajal, Lanaro (60' Chaves), Contreras, Díaz; Rosende, Farias, Silva (71' Guajardo), Valenzuela (83' Cantillana); Valencia, Riquelme

Wanderers: Leonardo Burián; Alex Silva, Paulo Lima, Emiliano Díaz, Maximiliano Olivera; Jonathan Rodríguez (74' Gastón Bueno), Santiago Martínez; Joaquín Vergés, Matías Santos, Nicolás Albarracín (83' Diego Riolfo); y Leandro Reymúndez (57' Juan Cruz Mascia).

Goles: 35' Alex Silva (W), 66' Jason Silva (P)

Árbitro: Víctor Carrillo (Perú)

Tarjetas amarillas: Valencia (P), Reymúndez (W), Mascia (W), J. Silva (P)

Estadio: Santa Laura-Universidad SEK (Santiago)

COPA LIBERTADORESJORGE SAVIA