Ramón Abila contó los momentos vividos a bordo del bus que trasladaba a la delegación. Dijo que se rompieron los frenos y que se salvaron porque el chofer chocó el vehículo contra la montaña.

Al principio se informó que el vuelco del ómnibus que trasladaba a los jugadores de Huracán hacia el aeropuerto de Caracas no había tenido consecuencias, pero a medida que transcurren las horas y se conocen los testimonios, los momentos vividos por el plantel del "Globo" fueron de honda preocupación.

Se supo que el jugador Patricio Toranzo sufrió heridas en su pie izquierdo y un poco antes el centrodelantero "Wanchope" Abila había contado a Cadena 3 de Córdoba qué fue lo que pasó. "El colectivo se quedó sin frenos y se rompió la caja de cambios. En la rampa encontramos un poco de freno. Nos íbamos para atrás, al precipicio y (el chofer) lo alcanzó a chocar contra la montaña, si no íbamos para ahí. Nos llevó para la montaña y nos dimos vuelta ahí", expresó según transcribe el diario Olé. Sin embargo, no quedó ahí.

"Nos asustamos cuando empezó a caer gasoil; pensamos que iba a explotar. Ese fue un momento también desesperante, pero por suerte no pasó nada grave", indicó.

"Gracias a Dios estamos todos bien, medio asustados, pero bien. No nos damos cuenta de lo que pasamos, estamos ocupándonos de algunos chicos un poco más golpeados. Nos pasaron que estaban todos bien y atendidos y los dejan más que nada por precaución".

Toranzo, Diego Mendoza (autor del gol que le dio la clasificación a Huracán a la fase de grupos) y el preparador físico Pablo Santella tuvieron que ser internados y así continuaban hasta entrada la noche del miércoles.

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