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Hay que embromarse

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En la avenida más emblemática de la ciudad de Buenos Aires, “Metrobus 9 de Julio” beneficia a 255.000 personas todos los días. Con 3 km de extensión, permite a sus usuarios ahorrar hasta un 50% de tiempo de viaje.

En la avenida más emblemática de la ciudad de Buenos Aires, “Metrobus 9 de Julio” beneficia a 255.000 personas todos los días. Con 3 km de extensión, permite a sus usuarios ahorrar hasta un 50% de tiempo de viaje.

Tiene un impacto positivo sobre el medio ambiente urbano, y mejora sensiblemente la forma en que se mueven los argentinos en el área central de la ciudad. Las paradas de colectivos ofrecen un refugio accesible, confortable y seguro y están equipadas con cámaras de seguridad, pantallas que brindan información y servicio de WiFi.

Transantiago es un sistema de transporte público urbano que opera en el área metropolitana de la ciudad de Santiago, capital de Chile, destinado a cambiar por completo la organización del transporte colectivo por microbuses existentes en la urbe. Comenzó a operar en una primera etapa en 2005. Hacia 2012 se realizó una reestructuración completa del sistema incorporando un nuevo esquema de operación basado en unidades de negocio. Transantiago reformó por completo el transporte de la ciudad. Para ello, se desarrolló una enorme inversión en infraestructura y flota vehicular. Ambos sistemas fueron desarrollados por diferentes gobiernos. Mientras que en la vecina orilla lo impulsó y concretó el actual presidente Mauricio Macri, con una oposición feroz, tildado por algunos “religiosos” como neoliberal, cuando en realidad es un gran pragmático, la obra del país andino la realizó la socialista Michelle Bachelet con un enorme sacrificio.

Esto demuestra que no se trata de izquierda o de derecha, de gobiernos populistas o neoliberales.

Se trata de capacidad para gobernar, gestionar, y sobre todo para ejecutar. No queremos que se nos tilde de aguafiestas pero con solo observar lo que pasa en nuestro país, la resignación es total. ¡Qué incapacidad, por Dios! ¿Qué hicimos para merecer esto? El corredor Agraciada/Garzón es uno de los corredores de la ciudad de Montevideo creados a partir del Sistema de Transporte Metropolitano. Una auditoría del BID que no fue publicada y un informe de la Oficina de Evaluación y Supervisión (OVE) de proyectos del BID, detallan las presiones de las empresas y la falta de capacidad de la intendencia que llevaron al fracaso del corredor Garzón. Justamente el BID prestó una cifra millonaria para obras similares en Lima, Cali y Montevideo. En las dos primeras los proyectos lograron transformación y prosperidad. Solo Montevideo fracasó. Hemos visto publicado recientemente que “Las Autoridades denuncian sabotaje por la presencia de animales sueltos: «Corredor Garzón: callejón sin salida»”.

“Inspectores de la IMM se vieron sobrecargados a raíz del último apagón de todos los semáforos del Corredor Garzón. Durante el fin de semana pasado también debieron intervenir, pero en tal caso para colaborar en el retiro de animales sueltos en la calle...” Ahora se anunció que los cordones de la vereda del “corredor General Flores” no están a la altura adecuada, y el ascenso y descenso de pasajeros no se ajustaría a lo inicialmente previsto.

En el “corredor Garzón” los problemas se habían originado con la altura del techo de las paradas, que estaba mal.

Suficiente. Estos gobiernos del FA cada vez hacen más para hacernos parecer a una República Bananera. De to-dos los uruguayos dependerá terminar con ellos y traer el cambio.

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Ignacio Sienra

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