Desvío de tránsito

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@| A las 7:30 de la mañana del 18 de octubre de 2017, iba en el auto por la rambla, rumbo a mi trabajo en la Ciudad Vieja.

Ya en la curva del Faro de Punta Carretas el tráfico comenzó a ponerse intenso hasta quedar detenidos frente al Monumento al Holocausto. Luego de unos minutos continuamos avanzando muy lentamente, solo unos metros... así hasta llegar a las proximidades del edificio del MERCOSUR, donde hoy fue abierta la Conferencia Mundial sobre Enfermedades No Transmisibles (ENT), iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Alegremente los organizadores vallaron prolijamente todos los alrededores, cosa de dejarnos bien embretados a todos los que tuvimos la mala fortuna de caer en ese embudo, sin posibilidad de zafar.

Total desprecio de las autoridades, llámese Ministerio del Interior o Intendencia de Montevideo, para con nosotros los usuarios. Ni un solo Policía o Inspector de la Intendencia asignado a la tarea de prevenir el gran embotellamiento que se produjo.

A las 8 y 20 de la mañana logré llegar a mi destino, sin tiempo para el descanso, porque tuve que volver enseguida al punto de partida. En el recorrido comprobé que a las 8:30 dos Inspectores de Tránsito estaban apostados en la Rambla Gran Bretaña y Ciudadela y a las 9:06, por la Avenida Rivera, mano hacia el este, pasando unos metros la puerta de entrada del Cementerio del Buceo, tres más, conversando alegremente; autos circulando en ambos lugares: el mío y dos mas.
De ir a cumplir con la que tendría que ser su labor en
esas horas, en los alrededores del edificio del MERCOSUR, mejor ni hablamos.