Proyecto político

@|No recuerdo quién sentenció con mucha agudeza y especial inteligencia para describir el panorama político actual “El Frente Amplio está haciendo todo lo posible para perder y los Partidos de oposición están haciendo todo lo posible para no ganar”.

Cómo se nota la falta de dos personalidades como lo fueron los doctores Carlos Maggi y Cucho Sienra, que con su claro estilo repiqueteaban permanentemente en los medios de prensa que la única forma de garantizar un triunfo electoral era dar un paso trascendente de los Partidos de oposición al mejor estilo de los partidos chilenos que enfrentaron en las urnas al pinochetismo, derrotándolo.

La Concertación fue la expresión más sensata, inteligente y realista de dirigentes políticos que dejaron de lado enfrentamientos y prejuicios del pasado que les permitiera consolidar un proceso democrático el qué, través de los años se fue proyectando con madurez y en bien de Chile.

Algunas encuestas señalan cierta ventaja del Partido Nacional sobre el Frente Amplio, si bien son datos alentadores no podemos dejar de lado que estamos a dos años y poco para las elecciones y que el candidato que logre triunfar en las internas deberá ser apoyado por la totalidad del Partido opositor ganador como también por la inmensa mayoría del resto de los Partidos de oposición.

Sensatamente, ¿hay algún candidato de la oposición que por sí mismo sea capaz de ganar al candidato del FA? Creo que por más inteligente que lo sea, si no logra motivar a los miles y miles de integrantes de los otros partidos y aún del mismo, será una instancia más que difícil.

El FA luego de muchos años en el gobierno fue creando una estructura militante a través de todo el cuerpo del gobierno central, entes autónomos, intendencias, planes sociales, contrataciones, etc., ya consolidada.

¿Sería sensato enfrentar esta férrea unidad electoral solamente con el discurso de la unidad a través del balotaje, 60 días antes de las elecciones?
Frente al riesgo de un cuarto gobierno del FA, ¿qué les impide a nuestros dirigentes políticos de la oposición crear un mecanismo político-electoral que le de plena garantía y certeza a la mitad del país?

¿No tiene acaso plena vigencia lo que con su característica lucidez sentenciaba Maggi?: “27 o más Partidos que suman sus votos siempre ganan a dos o tres que no se suman”.

¿Es que no tendremos dirigentes políticos que estén a la altura de las circunstancias que permitan que Uruguay reencuentre el camino trazado por los partidos tradicionales?

Menuda responsabilidad histórica tendrán nuestros dirigentes políticos si no logran un gran acuerdo político que nos traiga esperanza.