La oposición venezolana aseguró este lunes que sus 112 diputados seguirán legislando pese al fallo del Tribunal Supremo de Justicia.

El máximo tribunal de Venezuela dijo que todos los actos de la recién renovada Asamblea Nacional, dominada por la oposición por primera vez en 16 años, serán nulos, hasta que su directiva revierta el juramento a tres diputados de ese grupo político.

La sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que se publicó este lunes, considera que la directiva del parlamento, que asumió funciones la semana pasada, no cumplió con una orden judicial que prohibía que juraran sus cargos algunos diputados que ganaron en las elecciones de diciembre.

La directiva de la Asamblea Nacional aseguró dos tercios del parlamento al desafiar la orden judicial en su segunda sesión del año y de inmediato quedó abierto un conflicto de poderes tras el cambio de fuerzas políticas en el legislativo.

"Se ordena a la junta directiva de la Asamblea Nacional dejar sin efecto la referida juramentación y en consecuencia proceda con la desincorporación inmediata de los ciudadanos Nirma Guarulla, Julio Haron Ygarza y Romel Guzamana", dice la sentencia que se difundió en el sitio de internet del tribunal.

"Son nulos absolutamente los actos de la Asamblea Nacional que se hayan dictado o se dictaren, mientras se mantenga la incorporación de los ciudadanos", agrega el texto, que ratifica en el fallo la suspensión temporal de los diputados electos en el estado Amazonas tras las elecciones de diciembre.

La bancada oficialista -que introdujo la demanda de impugnación de la elección de esos legisladores a pocas horas de iniciar el nuevo parlamento- acudió al máximo tribunal a denunciar la actuación de la directiva, intensificando la confrontación política, en medio de la profunda crisis económica que vive la nación petrolera.

Desde la oposición consideran que las decisiones del Tribunal Supremo de Justicia, que en la última década ha fallado mayoritariamente a favor el Gobierno, no pueden prevalecer sobre la voluntad de los electores.

Con la idea de revisar el funcionamiento del poder judicial, la mayoría opositora en la Asamblea designó una comisión que verificará la elección de algunos magistrados del TSJ, que aprobó el anterior parlamento dominado por el oficialismo una vez que sufrieron el revés electoral.

"Si está en desacato, nadie va a reconocer la Asamblea Nacional", dijo Diosdado Cabello, diputado y número dos del partido gobernante. 

"El resto de los poderes no están obligados a reconocer la Asamblea. Pero el Estado no se puede paralizar", agregó a la televisora local apenas se conoció la sentencia.

El presidente Nicolás Maduro dijo que su Gobierno tenía previsto presentar ante el nuevo parlamento un decreto de emergencia económica, que consideran vital para hacer frente a la severa caída de ingresos que produce el desplome de los precios del petróleo, la principal fuente de divisas de Venezuela.

La oposición, por su parte, se disponía a aprobar una serie de leyes para conseguir la libertad de políticos opositores presos y también retomar el control del Banco Central y del gasto público, como forma de ser un contrapeso al Gobierno socialista.

"El gran perdedor será Maduro, ya que va a crear una crisis institucional. Él quiere inmovilizar la Asamblea Nacional, al igual que lo hizo Fujimori", dijo Ramón Escovar, abogado asesor del bloque opositor, refiriéndose a la disolución del Congreso que ordenó el presidente peruano Alberto Fujimori en 1992.

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