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Submarino argentino continúa desaparecido en el Atlántico

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El presidente argentino visitó a los familiares de los 44 tripulantes. Foto: AFP

ARGENTINA

La Armada descartó que un “ruido” registrado fuera una señal en morse.

El presidente argentino visitó a los familiares de los 44 tripulantes. Foto: AFP
El presidente argentino visitó a los familiares de los 44 tripulantes. Foto: AFP

El alambrado de ingreso a la base naval de Mar del Plata era ayer lunes un rosario de deseos y un mar de angustia. Como ropa al sol colgaban banderas, fotos religiosas y mensajes para los 44 integrantes de la tripulación del submarino argentinos perdido desde el miércoles en el Atlántico Sur.

Ayer por momento surgió una pequeña pista de que habían dado con algún mensaje del submarino. Pero todo se disipó por la noche, cuando la Armada confirmo que el "ruido" que se habían registrado y grabado varias naves no era del submarino ARA San Juan.

"El ruido se analizó y no corresponde a un submarino, a un patrón de golpes de casco en sistema morse", dijo el vocero de la Armada, Enrique Balbi. "Es un ruido continuo, constante, que podría llegar a ser ruido biológico", explicó.

"No obstante, vamos a aprovechar las navegaciones en la zona para hacer un barrido por el mismo punto donde se registró el ruido, para que no queden dudas y descartar si este ruido, como dice el estudio, no es de un submarino y no es de golpe de casco con señal de morse", agregó.

Los sonidos fueron captados en el Atlántico Sur, a unos 360 kilómetros de la costa argentina y a una profundidad de unos 200 metros. Desde que se conoció la noticia de que habían sido registrados, la Armada pidió "cautela", ya que no estaba confirmado que provinieran del ARA San Juan. Finalmente, confirmaron, tras analizar el sonido, que no correspondía al submarino.

La versión, que da cuenta de "ruidos como de herramientas golpeando el casco de un submarino" —un recurso habitual para alertar sobre la presencia de un sumergible a rescatistas—, fue citada por una fuente de la Marina de Estados Unidos a la cadena CNN.

El ARA San Juan desapareció el miércoles mientras se desplazaba desde el puerto sureño de Ushuaia a la ciudad costera de Mar del Plata. Más de una decena de navíos y aeronaves internacionales participan en la búsqueda, obstaculizada por mal tiempo, que generaba olas de hasta seis metros de altura.

El apoyo de Macri.

Los familiares de los tripulantes recibieron ayer lunes el apoyo del presidente Mauricio Macri, quien les dijo que se "está haciendo todo lo posible" para localizar la nave. Macri visitó la base de Mar del Plata y habló con los mandos navales y las familias.

Norma Morales, madre de Luis García, uno de los tripulantes del submarino, dijo: "Los familiares estamos tratando de estar bien y apoyándonos entre todos. Cuando uno flaquea, los demás le damos ánimo".

Uno de los psicólogos que asiste a los familiares, Víctor Stein, sostuvo en diálogo con la prensa en el ingreso a la base: "Nuestra tarea es fortalecer el vínculo del grupo. Pero ellos tienen una preparación previa de antemano, como entrenados para cada tipo de situaciones, y pasan el tiempo en fortalecer a su propia grupalidad en la emergencia".

"Esto mismo pude comprobarlo cuando estuve trabajando con la emergencia de los 33 mineros de Chile", indicó el especialista, quien pidió a la ciudadanía "acompañar a los familiares". Stein tiene experiencia en situaciones de traumas porque trató a soldados que participaron de la Guerra de Malvinas en 1982. Finalmente, destacó que es necesario "ser cuidadosos con la información y hay que remitirse a la información oficial. Me doy cuenta que los propios compañeros de la fuerza dan mucha información técnica a los propios familiares y eso es muy tranquilizante".

"Valiente muchachada de la Armada: con el corazón en pausa hasta que vuelvan", reza uno de los carteles en caligrafía de rigidez militar, sujeto al alambrado de la base de Mar del Plata con cintas con los colores patrios.

La mayoría de los tripulantes reside con sus familias en esta ciudad.

Algunos son oriundos de provincias lejanas, como Eliana Krawczyk, que conoció el mar a los 21 años y llegó desde Misiones para convertirse en la primera mujer submarinista de Sudamérica. Es la jefa de armas del ARA San Juan.

"Fuerza papá, tu familia te espera", dice otro de los carteles escrito sobre el celeste y blanco de la bandera argentina y con una imagen de la virgen del Carmen, Stella Maris, patrona del Mar y de los marinos.

"El estado de ánimo en general es bueno. Lógicamente que hay gente con más ánimo y otros menos, pero hay un espíritu positivo de que en algún momento pueda haber algún indicio de encontrar al submarino", dijo Jorge Villarreal, padre de Fernando, un tripulante. Jorge no basa su confianza en ingenuo optimismo. "Ellos están muy bien preparados. (...). Seguramente ellos conocen bien cada rincón del submarino y cómo manejarlo", confía.

La carta a los "valientes muchachos de la Armada".

En medio de la creciente incertidumbre por la falta de indicios del paradero del submarino ARA San Juan, Jorge Bergallo, el padre de uno de los tripulantes, difundió una emotiva carta en Facebook que se viralizó. Los familiares de la tripulación se trasladaron a la base naval de Mar del Plata, donde reciben contención y asistencia psicológica. Bergallo difundió un texto titulado "Valiente muchachada de la Armada", que escribió el reverendo Padre Fonrouge. "Para todos aquellos que no lo saben, estos 43 hombres y 1 mujer de la Armada Argentina se encuentran oficialmente perdidos, cumpliendo la misión encomendada de realizar las tareas de vigilancia de pesqueros furtivos de países extranjeros que vienen, roban y depredan los recursos de todos los argentinos", arranca la carta.

"Allá están, vaya a saber dónde y en qué circunstancias", señala.

El texto destaca el "compromiso, valor, coraje y profesionalismo" de los integrantes de la Armada. "Es la Armada Argentina que, frente a la adversidad, afronta con hidalguía su compromiso. Ninguno de sus integrantes, jamás hicieron un paro o cortaron una calle. Pensemos el país y los valores que queremos dejarles a los que criamos", completa. LA NACIÓN

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