El partido del expresidente de Perú ya hizo caer a cuatro ministros del gobierno de Kuczynski.

Un posible indulto de Alberto Fujimori resurgió con fuerza en Perú, en momentos en que el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski está contra las cuerdas por una poderosa oposición, liderada por la hija del expresidente, preso por crímenes de corrupción y contra los derechos humanos.

El tema recurrente en el debate político del último año, renace en medio de una creciente pugna entre el oficialismo y el Congreso que controla la Fuerza Popular, cuya líder Keiko Fujimori no le ha dado tregua a Kuczynski desde que este la derrotó por un escaso margen en las presidenciales de 2016.

En menos de un año, Kuczynski ha perdido a tres ministros por presiones del Parlamento, y todavía debe gobernar hasta 2021. Y ahora la posibilidad de un indulto llega luego de que el Parlamento rechazó respaldar la gestión del ministro de Economía, Alfredo Thorne, y obligó a su renuncia.

"Es el momento de ver el tema, con tranquilidad", declaró Kuczynski.

El mandatario señaló que él se ha cuidado mucho de decir qué cosas se puede atribuir y qué cosas no, en una entrevista al semanario inglés The Economist en la que habló del indulto a Fujimori.

La ley permite al presidente otorgar indultos por Fiestas Patrias —que se celebran el 28 de julio— y por Navidad.

En 2013, el gobierno de Ollanta Humala le negó a Fujimori el indulto humanitario, una posibilidad que hoy respalda el 59% de los ciudadanos, según recientes sondeos.

Keiko Fujimori ya había presentado en mayo otro hábeas corpus para anular la sentencia que condenó a su padre por violaciones de los derechos humanos, pero fue rechazado en primera instancia por un Juzgado Penal de Lima.

"Veo a Kuczynski contra las cuerdas, recibiendo golpe tras golpe, sin aire, requiere el oxígeno del indulto. Él ya estaba tocando ese tema, aunque va a seguir contra las cuerdas", opinó el gerente de la consultora Vox Populi, Luis Benavente. Para este analista, "si Kuczynski opta por el indulto, va a mostrar este hecho como un chantaje político (...) Ahora, el nivel de hostilidad del Congreso está creando una situación de ingobernabilidad mucho mayor a la que tenía Alberto Fujimori en 1992 antes de dar el autogolpe", que lo llevó a cerrar el Parlamento e iniciar un régimen autocrático.

Kuczynski tiene la opción constitucional de cerrar el Congreso si es que este le niega la confianza a dos gabinetes ministeriales consecutivos y convocar a elecciones parlamentarias. Pero él rechazó esa opción. "No vamos a cerrar ningún Congreso", aseguró.

"Si nada pasa en el gobierno, las caídas de ministros van a seguir. La pelea entre Ejecutivo y Legislativo ha asumido esas formas porque ninguno de los dos tienen poder y legitimidad. Keiko gobierna porque su padre está preso. Y su poder lo logra manteniendo al tope la confrontación", consideró, por su parte, el analista Mirko Lauer.

Otro hijo del expresidente, el congresista Kenji Fujimori, quien más ha conciliado con el gobierno, a contramano de su partido, ya celebró: "Gracias, señor presidente. Es hora de voltear la página. Le estaré eternamente agradecido", escribió en Twitter.

"Lleva meses evaluando el caso, llegó la hora de actuar. Haga uso de su potestad de presidente. Indúltelo", comentó por su parte, con más confrontación, Keiko Fujimori.

"Lo único que quiero decir es que no hay ninguna conexión entre un indulto humanitario y la política peruana", aclaró el presidente. "La política es una cosa, la salud de la persona es otra cosa", enfatizó Kuczynski, de 78 años.

Kuczynski se impuso en la recta final de las presidenciales gracias al antifujimorismo de izquierda. Algunos izquierdistas moderados, incluso, forman parte de su gobierno. Él solo era favorable al arresto domiciliario de Fujimori, propuesta que no prosperó en el Legislativo.

"Lo están arrinconando y en vez de dar la batalla como un estadista, cede a la presión fujimorista", señaló Gerónimo López, secretario general de gremio de trabajadores CGTP.

"El Frente Amplio (partido de izquierda) y la izquierda que cogobierna con él, no verá con simpatía el indulto a Fujimori, a quien rechazan por las violaciones a los derechos humanos", agrega Benavente, de Vox Populi. Benavente cree que Fujimori tendrá vida política activa. Allí habría que ver a quién apoya. Keiko, que ya perdió dos presidenciales, tomó distancia de su padre en la última contienda para captar votos de centro.

Pero Kenji, que tiende lazos con el gobierno y defiende las causas de las minorías, en abierta discrepancia con su conservador partido, ha sido más fiel a la esencia: "El fujimorismo no tiene alma sin él (su padre) libre", ha dicho.

El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, fortaleció el poder de su primer ministro, Fernando Zavala, al designarlo ministro de Economía, en medio de una pugna con el fujimorismo, que controla el Congreso y forzó la renuncia del antecesor en ese despacho, Alfredo Thorne.

Zavala, quien ya fue ministro de Economía en 2005 durante el gobierno de Alejandro Toledo (2001-2006), también se mantendrá al frente de la presidencia del Consejo de Ministros. Esta duplicidad de funciones fue destacada el jueves por Kuczynski, quien recordó a los periodistas que podía "citar a varios ministros (que) en el pasado han sido premieres (primeros ministros) y han tenido una cartera".

Alfredo Thorne debió renunciar tras perder la confianza del Congreso, dominado por la bancada del partido fujimorista Fuerza Popular, a raíz de una conversación que tuvo con el contralor Edgar Alarcón, a quien supuestamente presionó para tener una opinión favorable para la construcción del nuevo aeropuerto del Cuzco, que ya fue suspendida. Thorne se convirtió en el cuarto miembro en salir en menos de un año, tras la censura del ministro de Educación y las renuncias de los de Transportes y Defensa.

El expresidente peruano Alberto Fujimori (1990-2000), de 78 años, está preso desde 2007 cumpliendo una condena de 25 años. Su salud se ha deteriorado en los últimos años y su ingreso a clínicas se ha hecho recurrente debido a que padece hipertensión arterial y una lesión cancerígena en la lengua. Recientemente ha tenido episodios cardíacos. Fujimori fue condenado en 2009 a 25 años de prisión como autor mediato (con dominio del hecho) del asesinato de 25 personas en las matanzas de Barrios Altos (1991) y La Cantuta (1992) perpetradas por el grupo militar encubierto Colina, y por los secuestros del empresario Samuel Dyer y del periodista Gustavo Gorriti en 1992. Ese año Fujimori disolvió el Parlamento.

CRISIS POLÍTICA EN PERÚ