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Obama dijo que es "un acto de odio y de terror"

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El presidente estadounidense criticó lo “fácil” que es que un arma caiga en manos de un terrorista.

El presidente estadounidense condenó ayer como un "acto de terror y odio" el peor tiroteo en la historia el país, que causó la muerte de 50 personas en una discoteca gay en Florida (sur).

Obama expresó su consternación ante la "horrible masacre" y dijo que, aunque la investigación está en fase preliminar, "sabemos lo suficiente para decir que esto fue un acto de terror y de odio".

"El FBI apropiadamente está investigando esto como un acto de terrorismo", señaló el mandatario, al leer un breve comunicado en la Casa Blanca.

En una alocución efectuada tras reunirse con el director del Buró Federal de Investigación (FBI), James Comey, y sus asesores en materia de seguridad nacional, Obama admitió que las autoridades desconocen aún "las motivaciones precisas del asesino".

Pero el mandatario estadounidense llamó a no caer en desesperación, al decir que "ningún acto de terror u odio puede cambiar lo que somos".

"Y como americanos, estamos unidos en el dolor, la indignación y la determinación para defender a nuestra gente", subrayó el mandatario, en un tono que reflejaba la gravedad de la peor matanza que sufre EE.UU. desde los atentados del 11 de septiembre de 2001.

Como muestra de duelo, Obama ordenó hoy que las banderas ondeen a media asta en la Casa Blanca y en todos los edificios federales hasta el anochecer del 16 de junio "como señal de respeto por las víctimas del acto de odio y terrorismo" en el club de Orlando.

Debate.

La matanza de Orlando cae en el medio de la campaña electoral estadounidense y relanza tanto el debate sobre las armas.

Ayer, las autoridades corroboraron que Mateen compró legalmente armas de fuego en EE.UU., de ahí que Obama señalara en su discurso que la masacre representa un "recordatorio más de lo fácil que es que un arma caiga en las manos de alguien y le permita disparar a gente en una escuela, un lugar de culto, un cine o una discoteca".

El presidente ha abogado en varias ocasiones por la aprobación de leyes que restrinjan el derecho a poseer y portar armas, contemplado en la Segunda Enmienda a la Constitución de Estados Unidos, si bien se topó siempre con la firme oposición del Congreso.

El virtual candidato del Partido Republicano, Donald Trump, se metió en el debate, pidió la renuncia de Obama y criticó su alocución: "Se olvidó de pronunciar las palabras Islam radical. Solo por esa razón debería renunciar".

"Necesitamos proteger a todos los estadounidenses, al margen de su origen y creencia, del terrorismo radical islámico, que no tiene lugar en una sociedad abierta y tolerante", afirmó el magnate inmobiliario.

En su comunicado, Trump, que se ha quedado solo en la carrera republicana para acceder a la Casa Blanca en los comicios de noviembre, amplió sus críticas a Hillary Clinton, su rival demócrata hacia los comicios presidenciales de noviembre. "Si Hillary Clinton, después de este ataque, todavía no puede decir esas dos palabras, islam radical, deberá abandonar su carrera por la Presidencia".

En su comunicado, Trump sostuvo que Estados Unidos recibe cada año más de 100.000 migrantes procedentes de Oriente Medio, y desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 "centenares de migrantes o sus hijos han sido implicados en actos de terrorismo en EE.UU.".

"Si no actuamos con dureza e inteligencia muy rápido, ya no vamos a tener un país. Porque nuestros líderes son débiles, ya había advertido que esto iba a pasar, y solo está volviéndose peor", sostiene el candidato presidencial republicano.

A la mañana, Clinton escribió en su cuenta de Twitter: "Desperté con la noticia devastadora de Florida. Mientras esperamos más información, mis pensamientos están con los afectados por este acto horrible", afirmó.

En un comunicado hecho público publicado horas más tarde, la exprimera dama y exsecretaria de Estado abogó por redoblar los esfuerzos para defender al país de "las amenazas internas y externas" y pidió que personas como el atacante de Orlando no puedan tener acceso a las armas que usó él.

"Esta es la mayor matanza (por disparos de una persona) en la historia de Estados Unidos, y eso nos recuerda una vez más que las armas de guerra no tienen lugar en nuestras calles", agregó la aspirante presidencial demócrata.

Asimismo, el senador Bernie Sanders, que ha competido con Clinton por la nominación presidencial demócrata y que aún no se rinde en la puja por ser el elegido de los demócratas, calificó la matanza de "horrible" e "inimaginable" y manifestó su esperanza de que los heridos "se puedan recuperar", en declaraciones a la cadena NBC.

Misa en honor a las víctimas.

El gobernador de Florida, Rick Scott, acudió ayer a una misa en memoria de las víctimas mortales de la matanza perpetrada esta pasada madrugada en una discoteca gay de la ciudad de Orlando (centro de Florida).

"Mi corazón está con las víctimas y los familiares", dijo en español el gobernador desde el altar de la iglesia El Calvario ante medio millar de fieles, en su mayoría de origen hispano, tal y como se prevé que puedan ser buena parte de las víctimas mortales de la masacre en el club gay, que celebraba la Noche Latina.

Entre los 50 fallecidos se cuenta Omar Seddique Mateen, presunto autor de la matanza, que murió por disparos de la policía.

Acompañado por el vicegobernador, Carlos López Cantera, Scott destacó que en una ciudad, estado y país de "inclusión", la fe de los cristianos les ayudará a superar este "terrible" momento. Tras asistir a la ceremonia religiosa, el gobernador destacó que en este "período de duelo" van a ayudar a las familias de las víctimas mortales y a los más de 50 heridos, algunos de ellos en estado crítico.

Scott se felicitó de que hubiese un agente del orden en el local en el momento del suceso, pues en caso contrario la cifra podría haber sido mucho mayor.

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