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Manejan el "nombre de guerra" del yihadista

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Estudios: por primera vez Moscú admite que es probable un atentado. Foto: AFP.
A handout picture taken on November 2, 2015 and released on November 3, 2015 by Russia's Emergency Ministry shows Russian emergency services personnel working at the crash site of a A321 Russian airliner in Wadi al-Zolomat, a mountainous area of Egypt's Sinai Peninsula. Russian airline Kogalymavia's flight 9268 crashed en route from Sharm el-Sheikh to Saint Petersburg on October 31, killing all 224 people on board, the vast majority of them Russian tourists. AFP PHOTO / RUSSIA'S EMERGENCY MINISTRY *RESTRICTED TO EDITORIAL USE - MANDATORY CREDIT "AFP PHOTO / RUSSIA'S EMERGENCY MINISTRY" - NO MARKETING NO ADVERTISING CAMPAIGNS - DISTRIBUTED AS A SERVICE TO CLIENTS *
-/AFP

Para los servicios de inteligencia británicos, el responsable del ataque contra el Airbus de la compañía rusa Metrojet es el líder de los yihadistas en el Sinaí egipcio. Se trataría de un terrorista conocido por su nombre de guerra: Abu Osama al Masri (es decir "el egipcio").

En Moscú, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, reconoció que Reino Unido entregó una carpeta con información reservada en torno al incidente de la aeronave comercial en la que murieron 224 personas.

De hecho, la agencia estatal rusa de noticias Sputnik manejaba ya información proveniente del Foreign Office británico sobre la información de inteligencia entregada al Kremlin indicando que "existe una alta probabilidad de que el avión fuera derribado por un artefacto explosivo".

Según versiones publicadas por el Sunday Times, la inteligencia británica ya está a la busca del líder del Wilayat —el grupo yihadista que juró lealtad al Estado Islámico en el Sinaí egipcio—, Abu Osama al Masri. E incluso se ofreció ayuda para la "muerte o captura" del terrorista con el envío de las fuerzas especiales SAS, equivalentes a los Seals estadounidenses.

Por los datos recabados por los servicios secretos británicos se estima que un militante del Estado Islámico logró colocar el artefacto explosivo en la cinta de equipajes del aeropuerto de Sharm el Sheij hasta la bodega al Airbus. Los fallos en los sistemas de seguridad del importante centro turístico egipcio fue detectados y denunciados por dos importantes periódicos la semana pasada. Según The Daily Telegraph días después del incidente en la vigilancia de las cintas transportadoras hay momentos enteros en los que no hay nadie vigilando. Por su parte los reporteros de The New York Times constataron que la vigilancia en la terminal aérea egipcia contiunaba siendo errática y relataban cómo el encargado de la pantalla de rayos X escribía mensajes de texto en su celular mientras pasaban los bultos por la cinta.

Estas condiciones, se conjetura ahora, facilitaron a los yihadistas la concreción del atentado a bordo.

Enigmático.

¿Quién es el misterioso líder yihadista? Su identidad es todavía una incógnita, ya que se lo conoce sólo por su nombre de guerra.

En los videos en los que ha aparecido se lo ve con el rostro difuminado, por lo que no es posible la identificación facial por los sofisticados métodos de investigación de las agencias más desarrolladas.

Sin embargo, el periódico The Sunday Times maneja que se trataría de un ulema (un doctor en la ley musulmana) de 42 años, procedente de la universidad de Al Azar, en El Cairo, que se ganó la vida durante un tiempo con la importación de prendas de vestir.

Pero también se maneja la posibilidad de que se trate de Mohamed Ahmed Alí, de 37 años, o aun de Yasri Abdel Moniem Nufal, antiguo jefe de otra organización terrorista que huyó de la cárcel durante la "primavera árabe" de 2011.

Otro dato que se ha manejado en los últimos días tiene que ver con la llamativa coincidencia en la fecha del atentado. Esta coincide con la del juramento de lealtad al Estado Islámico por parte de los militantes del Wilayat del Sinaí.

Moscú admite.

Inmediatamente al incidente el Kremlin se mostró reació a aceptar la posibilidad del atentado, en tanto El Cairo se mantenía cauto como hasta ahora.

"La posibilidad de un atentado terrorista, desde luego, se mantiene como una de las causas de lo que ocurrió", señaló ayer el primer ministro Dmitri Medvédev en una entrevista con el diario "Rossiskaya Gazeta" que se publica hoy.

Es la primera vez desde el desastre aéreo que un responsable ruso se refiere de forma directa a la versión de un atentado como causa de esta catástrofe, una hipótesis que dan casi por segura otros países como Reino Unido y EE.UU.

También se refirió a la decisión ordenada el viernes pasado por el presidente ruso, Vladímir Putin, de suspender todos los vuelos a Egipto hasta que se sepa por qué se estrelló el aparato de MetroJet poco después de despegar de Sharm el Sheij, en la península del Sinaí, con destino a la ciudad rusa de San Petersburgo. "La decisión es esta: nadie quiere arruinar a nadie sus vacaciones. La gente fue allí por un periodo determinado y deben seguir allí por ese periodo o esos días, y luego regresar, pero regresar de una cierta manera", señaló.

El Gobierno ruso estimó ayer en casi 25.000 los turistas que han regresado de Egipto desde que Putin suspendiera los vuelos a ese país, que es el principal destino turístico para los rusos.

Congresistas de EE.UU. no tienen dudas.

Varios congresistas de EE.UU., entre ellos el presidente del comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, aseguraron que todas las “evidencias” apuntan a que una bomba colocada por el Estado Islámico (EI) fue la causa de que se estrellase un avión ruso en Egipto el pasado 31 de octubre. “Cuando sumas la tecnología de satélite, el destello de calor en el avión, el hecho de que EI ha declarado la guerra a Rusia, y fuese un avión ruso con destino a Rusia; y además nuestra información de inteligencia y del Reino Unido, creo que todos los indicadores apuntan a que fue EI quien puso la bomba”, aseguró Michael McCaul, republicano, a la cadena FOX. [efe]

Reino Unido reserva información delicada.

El ministro británico de Exteriores, Philip Hammond, afirmó ayer en la sede de la ONU que su país compartió con otras naciones parte de la información sobre el siniestro aéreo en Egipto, pero se reservó otra "información de inteligencia delicada". Hammond, que se encuentra en Naciones Unidas para participar en una reunión del Consejo de Seguridad, respondió así en declaraciones a los periodistas tras las críticas de Egipto sobre la supuesta falta de cooperación de otros países en este tema.

Varios países, entre ellos el Reino Unido, sospechan que el siniestro se produjo por una bomba colocada en la bodega de la aeronave por algún fallo de seguridad en la terminal aérea. Las autoridades egipcias no confirman oficialmente esa hipótesis. Hammond dijo que la decisión del Gobierno de Londres de suspender sus vuelos a Sharm el Sheij, el miércoles pasado, se adoptó teniendo en cuenta toda la información recabada, incluyendo "informes de inteligencia delicados".

"La información que podríamos compartir la hemos compartido con nuestros socios. Algunas fuentes de inteligencia no las podemos compartir", insistió el jefe de la diplomacia británica. EFE

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