Eddie Justice pidió ayuda a través de mensajes de texto mientras se escondía de Omar Mateen. Su última conversación fue con su madre.

El joven Eddie Justice, de 30 años, que había enviado mensajes a su madre desde el local gay "Pulse" de Orlando mientras era mantenido como rehén, es una de las víctimas mortales de Omar Mateen, junto con otras 48 personas.

Lo confirmó la policía local, que hasta ahora identificó a 15 víctimas.
Eddie estaba oculto en el baño de mujeres, desde donde enviaba mensajes de texto a su madre, Mina, pidiendo desesperadamente ayuda.

La secuencia de mensajes fotografiados en el smartphone de la mujer dio la vuelta al mundo en Internet.

Domingo, 2:06 horas

— Mami te amo

En el club están disparando

— U ok ("¿Estás bien?")

— Atrapado en baño

— ¿Qué club?

— Pulse. Downtown

—Llama a la Policía

—Está viniendo

—Voy a morir

— Llámalos

—Ahora

—¿Sigues ahí?

—Contesta tu maldito teléfono

En ese momento, el servicio 911 respondió la llamada de Mina y le pidió que se quedara en línea, mientras tanto, Eddie Justice no respondía. pasaron casi 40 minutos hasta que volvió a escribir.

2:39 horas

"Llámalos, mami", decía el nuevo texto de Justice.

—Ya

—Ya viene

—Me voy a morir

2:42 horas

— ¿Alguien está herido?

— Muchos, sí

Tienen que venir a buscarnos

— Ok, ella (la operadora del 911) dice que están llegando

Luego, Mina le preguntó si había sido rescatado.

2:46 horas

— No

—Todavía en el baño

—Nos atrapó

—Tienen que venir a rescatarnos

2:49 horas

La operadora le informa a Mina que la Policía llegó al boliche Pulse. Le pidió a Eddie que le avisara cuando los viera.

— Apúrense

Está en el baño con nosotros

— ¿El hombre está en el baño con ustedes?

— Es un terror

—Sí

Ese fue el último mensaje de Eddie, a las 2:51 horas. En la tarde del domingo, Mina fue entrevistada por algunos medios de prensa, a quienes les mostró la conversación. La mujer se enteró de que su hijo se encontraba entre las víctimas mortales de la masacre este lunes de madrugada.

ESTADOS UNIDOSCon información de ANSA