Publicidad

La insólita medida del Papa contra uno de sus mayores detractores

Compartir esta noticia
Canonización de la Madre Teresa.  Foto: AFP

Raymond Leo Burke, un cardenal norteamericano y representante del ala más conservadora de la Iglesia es también cercano a Steve Bannon, el principal asesor de Donald Trump.

El cardenal estadounidense Raymond Leo Burke, considerado cabeza del sector ultraconservador que discute algunas decisiones del papa Francisco, ha sido enviado a la isla de Guam, en el Pacífico occidental, para ocuparse de las acusaciones contra el arzobispo por abusos sexuales a menores.

El viaje de Burke a esta pequeña isla, a más de 12.000 kilómetros de Roma, no responde a ningún tipo de decisión reciente del Vaticano, sino a que el pasado 5 de octubre se constituyó el Tribunal de Primera Instancia encargado de investigar este presunto caso de abusos cometido en la isla de Guam, y el presidente de dicho tribunal es el cardenal, aclararon fuentes vaticanas.

Como juez presidente de dicho tribunal, el cardenal Burke tiene el mandato de la Congregación para la Doctrina de la Fe de tomar testimonio a los acusados y a las supuestas víctimas, explicó el Vaticano.

Burke deberá permanecer en la isla el tiempo necesario para que interrogar a los testigos y recoger todas las informaciones necesarias para elaborar su fascículo y después entregarlo a la Congregación de la Doctrina de la Fe.

La noticia del viaje de Burke a esta isla del Pacífico ha llamado la atención de los especialistas en el Vaticano debido a que el cardenal estadounidense ha protagonizado dos episodios de contestación al pontífice.

Burke es uno de los cuatro purpurados firmantes de la cartaen la que se exigía al pontífice que resolviese cinco "dudas" sobre la exhortación apostólica post-sinodal "Amoris laetitia", sobre todo relativas a la posibilidad de que los sacerdotes puedan acceder a dar la comunión a los divorciados vueltos a casar y que resultan en pecado por cometer "adulterio".

El caso

El caso sobre el que indagará el cardenal es el del arzobispo de Guan, Anthony S. Apuron, de 71 años, y al que tres hombres le acusan de haber abusado sexualmente de ellos cuando eran monaguillos en los años 70, también la madre de una cuarta víctima, que ya ha muerto, acusa al arzobispo de estos cargos.

El arzobispo, que aún no ha sido imputado por la justicia civil, ha rechazado estas acusaciones.

El papa ya intervino hace seis meses cuando designó al arzobispo Savio Hon Tai-Fai como "administrador apostólico" en Guam ante la situación creada por las acusaciones.

El eterno femenino de una imaginativa pintora
Canonización de la Madre Teresa. Foto: AFP

VATICANOCon información de EFE

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

papa franciscoIglesia Católica

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad