ESTADO DE EXCEPCIÓN
Ola de violencia por denuncias de fraude en las elecciones.
El Gobierno de Honduras decretó el estado de excepción durante 10 días para frenar las acciones violentas y de vandalismo registradas en el país por el presunto fraude en las elecciones presidenciales del pasado 26 de noviembre
"Durante la vigencia del decreto queda prohibida la libre circulación" entre las "6 de la tarde y las 6 de la mañana en todo o parte del territorio nacional, en atención a los hechos que ocasione la restricción de esta libertad a recomendación de autoridad competente", indicó la información oficial.
Además, el decreto determina que las Fuerzas Armadas apoyarán conjunta o separadamente a la Policía Nacional.
El decreto ordena detener a toda persona encontrada fuera del horario de circulación establecido por la autoridad, o que de alguna manera sea sospechoso de causar daños a las personas o sus bienes.
Serán detenidos además quienes "se asocien con el objeto de cometer hechos delictivos o esté en peligro su propia vida". La ordenanza indica que toda persona detenida deberá permanecer recluida, y serán puestos a la orden de la Fiscalía General de la República cuando corresponda. "Se ordena proceder al desalojo de toda instalación pública, carreteras, puentes y otras instalaciones públicas y privadas que haya sido tomado por manifestantes o se encuentren personas en su interior realizando actividades prohibidas por la Ley", añade.
Honduras vive desde hace tres días una ola de manifestaciones protagonizadas por simpatizantes de la Alianza de Oposición contra la Dictadura, que presento de candidato presidencial a Salvador Nasralla y denuncia ser objeto de un fraude electoral.
Tras el escrutinio del 94,35 % de las actas de los comicios del 26 de noviembre, el presidente y candidato para la reelección, Juan Orlando Hernández, lidera la contienda con el 42,92% de los votos, mientras que Nasralla suma el 41,42 % de los sufragios.