CRISIS CON CATALUÑA

España enviará más policías estatales a Cataluña para bloquear cualquier medida destinada a celebrar un prohibido referendo independentista, anunció el Ministerio del Interior.

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El gobierno de Madrid enfrenta una de sus mayores crisis políticas desde el final de la dictadura franquista y el regreso de la democracia hace cuatro décadas, luego de calificar el referendo como un acto ilegal y tomar medidas policiales y judiciales para bloquearlo.

En un comunicado, el Ministerio de Interior español dijo que la nueva dotación de policías cumplirá en Cataluña "funciones de vigilancia del espacio público y mantenimiento del orden, y actuarán en caso de que se mantuviera el referéndum", aunque no precisó la cantidad de efectivos adicionales.

El presidente del gobierno de España, Mariano Rajoy ha asegurado que no se celebrará la consulta y ha pedido a las autoridades catalanas que la anulen, aunque la Generalitat, el gobierno catalán, ha reiterado que la mantendrá en pie y que tiene "planes de contingencia".

El anuncio de los refuerzos policiales se produce en un momento de elevada tensión antes de la consulta del 1 de octubre, con manifestaciones en las calles tras las detenciones de altos cargos catalanes y la incautación de material electoral y de propaganda. Miles de personas se han manifestado desde el jueves en Barcelona para pedir la liberación de los detenidos, que fueron puestos en libertad el viernes tras prestar declaración ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

"Ante una situación puntual en la calle, (el Gobierno) cree que su deber es apoyar con las fuerzas y cuerpos de seguridad la labor que realizan los Mossos (la policía catalana) en la calle", dijo el viernes el ministro portavoz del gobierno español, Íñigo Méndez de Vigo.