POR PRIMERA VEZ

La expresidenta y actual vicepresidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner rompió el silencio tras el estreno de la serie de Netflix sobre el fallecido fiscal Alberto Nisman. "Nisman: El fiscal, la presidenta y el espía", presenta diferentes escenarios del fatal desenlace del abogado -que falleció el 18 de enero de 2015 en su departamento de Puerto Madero, en Buenos Aires-, cuyas causas aún no están claras.

Cabe destacar que el debate sobre si Nisman se mató o lo mataron no ha cesado desde la fecha en que ocurrió su muerte, así como tampoco han terminado las imputaciones contra la expresidenta y su equipo más cercano, involucrándola con Irán, presentado por algunas partes como responsable del atentado contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) el 18 de julio de 1994 que acabó con la vida de 85 personas y dejó 300 personas heridas.

Fernández compartió este lunes de tarde en su cuenta de Twitter un artículo que escribió sobre la serie dirigida por Justin Webster para Netflix. Al texto lo tituló: "La paradoja argentina o cuando Netflix hizo lo que tendría que haber hecho Comodoro Py y Comodoro Py hizo lo que hace Netflix".

Al comienzo destaca que dicho texto lo escribe "después de terminar de ver por tercera vez" la serie, y remarca que "se hace cargo de sus prejuicios" sobre la producción de un material tan sensible. "Comprobé que se puede ser inglés, producir para EE.UU., pero tener objetividad y honestidad intelectual", enfatizó.

La expresidenta prosigue haciendo otra autocrítica. "Quiero reconocer que tengo mi autoestima demasiado elevada y me consideraba invulnerable -por formación e información- a la influencia de los medios de comunicación a la hora de hacer análisis y arribar a conclusiones. Y eso no es nada bueno".

Metiéndose de lleno en la serie, reconoce que antes de la misma consideraba que la fiscal que llevó en un comienzo el caso Nisman, Viviana Fein, no daba "la talla", pero destaca que "luego de haber visto todo lo que hizo, con filmaciones, fotos, testimonios y haber escuchado su propia palabrau2026 chapeau", dice reconociendo su labor.

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Sus comentarios positivos continúan para esta producción estadounidense, que ha revivido este caso en la sociedad argentina. "En términos cinematográficos y artísticos, el documental 'Nisman: el fiscal, la presidenta y el espía', es de una calidad excepcional". Además, una de las cosas que más le gustó es la "ausencia total" de una u201cvoz en off" y repara en este aspecto: "Lo que se dice un auténtico y verdadero documental en términos jurídicos".

La expresidenta destaca sobre todo el aspecto "jurídico" de la serie. "Lo que pudo lograr Justin Webster que no es abogado, ni juez, ni tiene responsabilidades institucionales: mostrar los hechos con objetividad, sin omisiones de testimonios y circunstancias, sin inventar hechos que no existieron y menos aún desarrollar hipótesis y relatos sin pruebas que los sustenten y que, al hacerlo, las conviertan en verdades".

Fernández apuntó duramente contra la justicia argentina. "Nada como Comodoro Py y parte del Poder Judicial para producir ficciones, dirigidas y guionadas en detalle por los servicios de inteligencia -nacionales y extranjeros- y difundidas por los medios de comunicación hegemónicos", y destaca: "Lástima que estos directores y estos guionistas no ganarán el único premio al que debe aspirar la verdadera Justicia: descubrir la verdad y darla a conocer".

Hacia el final de su mensaje, destaca el testimonio que aparece en la serie de quien fuera su canciller, Héctor Timerman "judío y canciller argentino que quiso que se conociera la verdad sobre el atentado a la AMIA", y que "dejó allí no sólo su testimonio, sino su legado de vida". Además, remata el texto con unas palabras de Timerman, que parece hacer suyas: "Si tienen una causa, la sigan hasta el finalu2026 pase lo que pase y cueste lo que cuesteu201d.