La periodista francobrasileña Manuela Picq, que ha colaborado para medios internacionales como la cadena Al Jazeera, enfrenta un proceso de deportación en Ecuador, tras ser detenida durante las violentas protestas del jueves pasado contra el presidente Rafael Correa en Quito.

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"El gobierno del Ecuador anuló, canceló mi visa (...) y ahora me están acusando de estar en situación irregular en el país", dijo Picq telefónicamente a la AFP desde un juzgado de Quito.

Picq, que también es docente de la privada Universidad San Francisco de Quito desde 2004, señaló que fue detenida durante las manifestaciones cuando, según ella, acompañaba a su pareja Carlos Pérez, dirigente de una organización indígena opuesta al gobierno.

Farith Simon, abogado de Picq, informó que la periodista fue acusada por policías de cometer una "contravención migratoria porque se encuentra ilegalmente en Ecuador", pese a que "tenía una visa vigente que fue revocada esta mañana".

"Si mantienen esta afirmación de que hay una situación migratoria irregular, por supuesto hay riesgo de que puede ser deportada", resaltó Simon.

Las autoridades policiales o judiciales no se han pronunciado sobre el caso de Picq.

Picq tenía un tipo de visa de intercambio cultural que le permitía realizar actividades académicas y de investigación universitaria.

El jueves pasado Ecuador vivió una jornada de protesta contra el gobierno de Correa que incluyó bloqueos de vías y dejó a 67 policías heridos y a 47 manifestantes detenidos, según un balance oficial.

Correa advirtió, en un encendido discurso ante sus simpatizantes, que no se "someterá al chantaje" de las fuerzas opositoras que protestaron.

Fue arrestada durante los incidentes del jueves en Quito