La comunidad judía argentina se reunió ayer a las puertas de la reconstruida mutualista AMIA, 22 años después de que un atentado acabara con la vida de 85 personas, para denunciar la "impunidad" en torno a esta "herida abierta" y recordar al fallecido fiscal Alberto Nisman, que estuvo a cargo de la causa.
Unas 600 personas se congregaron frente a la sede de la Asociación de Mutuales Israelitas Argentinas (AMIA) en el barrio de Once de Buenos Aires bajo el lema "La memoria nos une" en un acto al que acudieron familiares de víctimas, representantes de la comunidad judía y autoridades políticas nacionales y locales. A las 9.53 hora local, la hora exacta a la que en ese mismo lugar estalló la bomba el 18 de julio de 1994, sonó una sirena como homenaje "a esa sangre inútilmente derramada", tal y como declaró la periodista y presentadora del evento, Débora Plager, antes de pedir un minuto de silencio por los fallecidos.
"Las heridas que no cierran siguen doliendo. Las heridas que permanecen abiertas son una vergüenza para la sociedad argentina", dijo durante el acto el miembro de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), Julio Schlosser. Para Schlosse han pasado 22 años de "constante lucha" contra la "corrupción" y la "complicidad" por parte de células terroristas y de las propias autoridades. [EFE]Argentina, terrorismo, AMIA, aniversario, comunidad judía
Macri fue recibido con aplausos
La llegada del presidente Mauricio Macri fue recibida con un aplauso cerrado, aunque también hubo cautela. "Se recobra la esperanza de que se llegue a la justicia, pero la esperanza no se crea solo con el simbolismo de su presencia, sino que también con los actos del Gobierno", sostuvo Claudio Epelman, del Congreso Judío Latinoamericano.
comunidad judía reclamó justicia y recordó a Nisman