El acuerdo que firmarán mañana las FARC con el gobierno, abre el camino para que la guerrilla pasen a formar un partido político.

"El escenario lo veo muy difícil para ellos, no les auguro una gran facilidad en la búsqueda de votos", dice Fernando Giraldo, doctor en ciencias políticas de la Universidad de París III Sorbona. Para el académico, el grupo tendrá que enfrentar el "odio exacerbado" de la derecha que les enrostrará su pasado violento, dar una lucha interna para moderar su línea política, buscarse un espacio en la "fragmentada" izquierda colombiana e intentar ganarle seguidores a los partidos tradicionales.

Los primeros pasos de los guerrilleros devenidos en políticos los dieron la semana pasada algunos de sus jefes, en el marco de la décima Conferencia, la última como grupo rebelde, con discursos más alegóricos e imaginativos. Tras concluir la cumbre guerrillera, las FARC anunciaron que en mayo próximo harán su primer congreso como partido, y que en esa fecha darán a conocer el nombre que tendrán como movimiento político.

En el congreso de mayo, las FARC definirán su "programa político", los estatutos que los regirán, su esquema organizativo y la "línea" ideológica del nuevo partido, que seguramente seguirá siendo de izquierda, aunque probablemente más moderada.

El acuerdo de paz le otorgará diez escaños en las dos cámaras del Congreso para los dos próximos cuatrienios, del 2018 al 2026, y en los dos años que le restan al actual legislativo tendrán seis representantes con voz pero sin voto. ANSA

NUEVO PARTIDO POLÍTICO