El ministro de Trabajo había pedido una “reflexión” de parte del gobierno.

El ministro de Trabajo, Ernesto Murro, quedó solo ayer en el Consejo de Ministros después de plantear públicamente que era necesario "reflexionar" sobre los lineamientos salariales, pedido que el presidente Tabaré Vázquez no atendió.

Luego de que Murro planteara la necesidad de revisar las pautas, Vázquez dijo ayer que había tomado dos decisiones: la primera referida a los aumentos para jubilados y la segunda al mantenimiento de las pautas salariales, dijeron a El País fuentes políticas. En la reunión de ayer del consejo, Vázquez dio la oportunidad a los ministros para que se expresaran al respecto y Murro preguntó a qué pautas se refería, si a las del 2015 o a las del 2016, a lo que el presidente respondió que hablaba de los lineamientos acordados para este año.

En conferencia de prensa donde no estuvo presente Murro, el ministro de Economía, Danilo Astori, fue el encargado de dar el informe del consejo. "En 2016 se va a aplicar lo que corresponde para el 2016 porque se entiende que se han definido las pautas con la flexibilidad necesaria como para ser consistentes con la desaceleración y permitir defender la fuente de trabajo", subrayó Astori. Además, destacó que la decisión fue adoptada "por unanimidad" en el Consejo de Ministros y detalló que "la propuesta de mantener las pautas la encabezó el presidente", y que durante la reunión "ningún ministro manifestó su oposición" sobre el tema.

Cuando en 2015 el gobierno presentó sus lineamientos salariales les pidió a los sectores de actividad que se autocalificaran de acuerdo con su situación. Podían estar en situación de crecimiento, intermedia o en problemas. La aplicación de las pautas del 2016, supone recibir un punto o un punto y medio menos de aumento, según se reconoce por el Ministerio de Trabajo.

Durante toda la semana pasada, Murro realizó comentarios críticos con respecto a las pautas salariales. "Si el objetivo son determinados lineamientos que acordamos en el Consejo de Ministros pero hoy estos son superados por la realidad, tenemos que hacer una reflexión", valoró en declaraciones a El Espectador. Además, opinó que "si el objetivo es el control de salarios en función del empleo, acordar aumentos superiores genera un efecto no deseado".

Por su parte, Astori dejó la puerta abierta para una revisión de los lineamientos en caso de constatarse un deterioro del salario real, lo que según dijo "hasta ahora eso no ha ocurrido". "En caso de que se perciba una tendencia negativa hemos resuelto tomar las medidas que correspondan", aclaró Astori.

Consultado sobre si iba a dar un paso al costado, Murro dijo a El País que no piensa renunciar. Sin embargo, en el Frente Amplio recibió críticas por alinearse con los planteos del Pit-Cnt y marcar públicamente diferencias con el gobierno de Vázquez. El exencargado de prensa del Partido Socialista, Marcelo Visconti, opinó ayer en Twitter que "no es leal ni de alguien que dice está para trabajar en equipo, salir antes del debate y anunciar una postura discordante con la mayoría #Murro". A lo que agregó en la misma red social: "Esas actitudes tribuneras le están haciendo un daño terrible al gobierno. Campañitas personales ponen en riesgo los cambios".

Sin embargo, en el Partido Comunista entienden que la definición adoptada por el gobierno constituye "un profundo error", dijo a El País el diputado Gerardo Núñez. "Hacer caso omiso a lo que señala la realidad nos parece equivocado. Es una actitud que debería ser revisada y es importante tratar de acordar una salida que implique prestar atención al planteo de los trabajadores", dijo.

Astori anunció ayer que se dará un aumento a jubilados de $ 200 a partir de agosto. El incremento será para las pasividades mínimas que se ubican en los $ 8.767, para las cuales se anunció la decisión de adelantar para agosto parte del ajuste que se pensaba realizar en enero de 2017.

Astori recordó que en el último Consejo de Ministros abierto, realizado el 24 de junio en San Gregorio de Polanco, Vázquez se refirió a la posibilidad de que a partir de enero de 2017 se concretara un aumento especial para las pasividades mínimas, que se suma al tradicional reajuste por inflación. Asimismo, indicó que se agrega, por especial interés de Vázquez, el boleto urbano gratuito en todo el país para jubilados y pensionistas que perciben menos de $ 11.400. Esta medida regirá entre agosto y diciembre.

El aumento fue calificado como "insuficiente" por el director en representación de los jubilados en el BPS, Sixto Amaro. "Hay falta de sensibilidad de parte del gobierno", indicó a El Espectador.

Los sindicatos prevén dar pelea y ya anuncian movilizaciones luego que el ministro de Economía, Danilo Astori, dejó en claro ayer que no habrá cambios en los lineamientos salariales e incluso que comenzarán a regir los previstos para 2016, que se habían postergado en el primer semestre y que incluyen ajustes nominales inferiores, esto es, son menos beneficiosos para los trabajadores.

Para el 14 de julio el Pit-Cnt ya tenía acordado un paro general y según dijo a El País Ismael Fuentes, dirigente de la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios (Fuecys), a esto le sucederán “varias movilizaciones porque vamos a dar pelea porque se mantengan las pautas de 2015”.

“El gobierno sigue trabajando sobre la base de un previsto que en la vida no se da y se desconoce, se contempla una supuesta baja de la inflación cuando está claro que eso no es así; por algo en los últimos convenios trabajadores y empresarios acordaron con la excepción del Poder Ejecutivo. Obviamente estas pautas restringen la posibilidad de acordar salarios”, dijo Fuentes.

Este mes comenzarán a negociar los ajustes salariales 105 grupos, casi en su mayoría del comercio. “Cada sector va a analizar su realidad y en función de esa realidad se verá si está para el acuerdo o no. Ahora una posibilidad será que se negocie por arriba de las pautas y en otros va a haber situaciones de tensión”, dijo Fuentes.

Los lineamientos de 2016 según ha dicho el ministro de Trabajo, Ernesto Murro, quien había instado a reflexionar para modificar las pautas, mantienen los plazos de ajustes anuales y se acotan a dos años en vez de tres años como los anteriores. Sin embargo, implican aumentos nominales de un punto y un punto y medio inferiores a los de 2015, según explicó Murro. “El problema está en el correctivo que es lo que permite al trabajador que el salario real no caiga”, remarcó Fuentes.

Tras el Consejo de Ministros de ayer, Astori fundamentó la implementación de los lineamientos salariales nuevos y afirmó que se garantizará que no se pierda salario real. Los economistas ya han planteado que con las pautas salariales actuales se producirá pérdida de salario real.

“El país entiende que esos lineamientos han sido definidos con la flexibilidad necesaria como para ser consistentes con otras herramientas de política económica en esta época de desaceleración que está viviendo el país”, dijo Astori. Y agregó: “Son lineamientos que le permiten a Uruguay defender la fuente de trabajo en un escenario donde se han perdido miles de puestos de trabajo y al mismo tiempo le permiten contribuir al fortalecimiento de un camino para defender su poder adquisitivo”.

Astori de dijo que se acordó en el Poder Ejecutivo “hacer un seguimiento de la aplicación de estos lineamientos y tomar las medidas que correspondan si se percibe que hay una tendencia al deterioro de los salarios reales. Eso no ha ocurrido. Han crecido, bastante menos que antes, lo cual es lógico porque la economía se desacelera”.

EL PRESIDENTE SE JUGÓ POR ASTORIVALERIA GIL