El Sindicato Médico del Uruguay (SMU) reclamó al nuevo ministro de Salud Pública, Jorge Basso, eliminar los tickets de medicamentos y estudios en todos los centros del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS), porque "el dinero no puede ser un condicionante para que se lleve adelante un tratamiento".

"El presidente (Tabaré Vázquez) ha hablado de reducir los costos de los tickets, pero nosotros creemos que habría que eliminarlos. El proceso asistencial requiere de una continuidad y si accedemos al médico se nos tiene que garantizar que si este nos prescribe un medicamento o nos indica la realización de un estudio, el limitante no debe ser la posibilidad de pagar, o no", señaló a El País el presidente del sindicato, Julio Trostchansky. Este advirtió que el ministro, que visitó en la noche del martes la sede del SMU, "tomó nota de la propuesta", pero no dio señales sobre su posible realización.

En tanto, otros reclamos que fueron comunicados por el sindicato sí contaron con el aval del Ministerio. Basso prometió, según Trostchansky, avanzar en generar cada vez más cargos de alta dedicación (lo que implica trabajar 48 horas por semana en un mismo lugar), generar centros de referencia para patologías de baja prevalencia o de alto impacto social "para evitar que se dupliquen esfuerzos y poder generar procesos asistenciales de calidad" y crear protocolos para la atención de emergencias en el interior del país.

El ministro aceptó que es necesario mejorar los protocolos, para así evitar que situaciones como la sucedida en Artigas (cuando luego de explotar una garrafa dos pacientes quemados fueron trasladados en ambulancia a Montevideo, demoraron 10 horas en llegar, cuando en helicóptero habrían tardado 2; ambos murieron). Trostchansky le expresó que espera que este tema pueda solucionarse en los primeros dos años de gobierno de Vázquez.

Los otros sindicatos de la salud se preparan para presentar una serie de reclamos al nuevo ministro. La Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP) se reunirá la semana que viene para armar una plataforma que luego será comunicada a la cartera.

"Hay cosas que ya sabemos que las vamos a pedir: salarios a partir de los 30.000 pesos y más recursos humanos para la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE)", precisó a El País el miembro de la dirección de la Federación, Martín Pereira. Además, denunció que "mientras lo ideal es que cada enfermero atienda hasta 10 camas, hoy estamos en 17 o 18 por funcionario".

Desde el Sindicato de Enfermeros, su presidenta, Silvia Santana, dijo a El País que en breve pedirán una reunión con Basso donde le reclamarán que "cada cinco años de trabajo se computen seis para la jubilación, ya que los funcionarios con 50 años tienen muchas dificultades físicas y psicológicas.

En tanto, desde la Asociación de Funcionarios de ASSE (Afasse), su secretario general, Luis Pérez, dijo a El País esperar "de una vez por todas" ser presupuestados.

Pidieron más cargos de alta dedicación y en más especialidades. Generar protocolos para la atención de emergencias con pacientes traumatizados, advirtiendo una situación crítica sobre todo más allá del norte del río Negro. Crear centros de referencia en algunas patologías para evitar que los prestadores de salud dupliquen esfuerzos. Y que se deje de pagar tickets para exámenes y medicamentos.

La Federación se reunirá recién la semana que viene para hacer una lista de reclamos, pero hay algunos que en la interna del sindicato se manejan como obvios. Uno es la necesidad de salarios que superen los $ 30.000 para todos los cargos. Otro, la necesidad de más personal de enfermería (tanto auxiliares como licenciados) y de limpieza en todos los centros del país, sobre todo los de ASSE.

El sindicato de enfermeros pedirá que se computen distinto los años de trabajo, es decir que cada cinco vayan seis para la jubilación. También reclamarán aumentos en los salarios. Hoy los auxiliares ganan 14.000 pesos y los licenciados 23.000; la idea de ellos es que se pueda llegar a 18.000 y 32.000 respectivamente. También alertarán sobre la necesidad de más personal en los centros de salud.

Hoy el sindicato está negociando el cobro de partidas adeudas y después de esto se prestarán a luchar por la presupuestación. "Esto evitará que existan salarios diferenciados en el sector y evitará que suceda lo que pasó hasta ahora, que cuando emergencia y CTI se quedan sin gente se ven en la obligación de acudir a privados", advirtió desde el sindicato su secretario general, Luis Pérez.

Sindicatos lanzan ola de reclamos a las nuevas autoridadesCARLOS TAPIA