"Es indignante que los estudiantes tengan que mojarse cuando van al aula porque el alero tiene filtraciones; es indignante que en el turno nocturno se queden sin luz por los problemas en el tablero eléctrico o porque solo funciona un tubo luz de seis; que el docente tenga que levantar la voz para ser escuchado por la contaminación sonora del tránsito de la calle…".

Los problemas edilicios en el liceo 14 de Montevideo derivaron en que los docentes sindicalizados ocuparan ayer el centro educativo. Y en la asamblea desarrollada sobre el fin de la jornada, luego de la visita de un consejero de Secundaria, levantaron la medida.

El consejero Javier Landoni se comprometió, de palabra y sin firma, a arreglar las puertas en dos semanas, llamar a un electricista en estos días y subsanar las filtraciones de la azotea.

A la "falta de mantenimiento" que tiene este liceo, según denuncia el núcleo sindical, se le suma su ubicación. Tiene doble entrada, una por 8 de Octubre y otra por José Batlle y Ordóñez (ex Propios). El tránsito fluido de la zona combinado con la poca aislación por las "rajaduras de las ventanas" y la rotura de puertas, "dificultan el dictado de clases y la calidad educativa", señaló Paula Dabbadie, integrante del sindicato.

Y "hay un agravante", dijo Dabbadie: "un elevado número de estudiantes por grupo (29 por aula)".

FIN DE LA OCUPACIÓN