Puertas y candados de celdas rotos fue el saldo de un motín registrado en la noche del domingo. Un efectivo policial resultó lesionado.

Fueron 27 los detenidos que en la medianoche del pasado domingo provocaron un motín en el quinto piso de Cárcel Central.

Entre los principales protagonistas estuvieron “Manolo” y “Tulita”, los dos homicidas de la pareja paraguaya en Casabó, y Gustavo Lepere, uno de los secuestradores de la doctora Milvana Salomone.

Entre las versiones de fuentes judiciales que circularon ayer, una explica que los reclusos protestaron en disconformidad con un sistema que impuso más controles y un régimen de visitas muy acotado, por falta de sanitaria en las celdas y mala alimentación.

Otra fuente señaló que el mal clima comenzó a generarse el pasado viernes cuando fueron allí remitidos los dos homicidas del barrio Casabó que tendrían “cuentas pendientes” con otros presos también considerados muy peligrosos.

Pero una tercera versión relata que el motín, que duró 2 horas, comenzó el domingo apenas después de que un un custodio policial discutió varias veces con uno de los encarcelados.

El policía terminó siendo agredido y sufrió lesiones. Mientras que, de inmediato, el secuestrador Lepere comandó el levantamiento que derivó en la ruptura de puertas y objetos que estaban dentro de las celdas.

La situación fue controlada por el propio director del Instituto Nacional de Rehabilitación, Luis Mendoza, según informó Subrayado.

Los amotinados declararán en los próximos días ante la jueza penal Dolores Sánchez. Para ellos se han suspendido las visitas.

Cárcel Central seguirá albergando procesados “pesados” hasta que no se termine la cárcel de máxima seguridad de Santiago Vázquez.

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