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En un año se duplicó el número de las viviendas ocupadas en forma ilegal

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Foto: Darwin Borrelli.

Son 15.000 los hogares bajo esta modalidad en el país.

El número de hogares ocupados sin permiso en todo el país casi se duplicó en 2016 respecto del año anterior. Según los microdatos de la Encuesta Continua de Hogares del año pasado, publicados ahora por el Instituto Nacional de Estadística, en 2016 1,3% de los hogares de todo el país estaban ocupados sin permiso, lo que abarca unas 15.100 viviendas. En 2015 esta cifra era de 0,7% u 8.100 hogares.

Salvo en cinco departamentos que lograron reducir la cantidad de hogares con ocupantes sin permiso —Paysandú que pasó de 0,7% al 0,3%, Salto del 0,5% al 0,2%, San José del 0,4% al 0,1%, Tacuarembó del 0,4% al 0,3% y Artigas de 0,3% a 0,0%— y tres que no mostraron cambios —Cerro Largo 0%, Treinta y Tres 0% y Río Negro 0,8%— el resto de los departamentos verificó incrementos.

Los más relevantes se dieron en Montevideo donde casi se duplicó pasando de 1% de los hogares a 1,9%. Esto es, mientras que en 2015 había unos 4.800 hogares ocupados sin permiso, en 2016 se pasó a 9.200. En Canelones el crecimiento fue mayor: de 0,7% a 1,8% lo que representa un salto de 1.200 hogares a 3.200 hogares en un año. En Rocha también hubo un salto de 0,4% a 2,3% de los hogares lo que equivale pasar de 100 a 600 viviendas ocupadas sin permiso mientras que en Rivera se pasó del 0,1% al 1,1%, esto es, se pasó del entorno de las 30 a más de 350. Los otros departamentos donde subió el porcentaje de hogares ocupados sin permiso fueron Colonia (de 0% a 0,3%), Durazno (de 0% a 0,4%), Flores (de 0,1% a 0,4%), Florida (de 0,1% a 0,3%), Lavalleja (de 0,2% a 0,9%), Maldonado (de 0,4% a 0,5%) y Soriano (0,1% al 0,3%).

Si a los datos de ocupantes sin permiso se les suman los ocupantes con permiso, las cifras muestran que dos de cada 10 hogares (22,3%) están habitados por ocupantes.

Dueños.

En el otro extremo figuran los que cumplieron el sueño de la casa propia. Según los microdatos de la Encuesta de Hogares 2016, el año pasado el 59% de los hogares en el país era dueño de la vivienda en la que vivían. Esto implica que unos 680.000 eran propietarios de la vivienda. Entre los propietarios se incluyen cuatro situaciones: los propietarios de la vivienda y el terreno que todavía los están pagando, propietario de la vivienda y el terreno que ya los pagó, propietarios solamente de la vivienda y la está pagando y propietario de la vivienda solo que ya pagó.

La proporción de propietarios es bastante pareja entre los 19 departamentos. En donde hay más hogares propietarios de la vivienda es en Paysandú con un 65,2% mientras que le siguen Flores con un 64% y Rocha con el 63,6%. Maldonado, en el otro extremo, es el departamento donde hay menos hogares propietarios de la vivienda alcanzando el 52,6%.

Además hay un 18,7% de los hogares de todo el país cuyos habitantes son inquilinos. La mayor parte de estos se encuentra en Montevideo (24,2% de los hogares alquilan) y le siguen Maldonado (19,8%) y Colonia (19%). El departamento donde hay menos hogares alquilando es Artigas con apenas un 8,6% en esta situación.

Comodidades.

El relevamiento del INE analiza cuántos hogares tienen algunas privaciones. La mayor de las privaciones que tienen es el no contar con calefacción. El 10% de los hogares en Uruguay, unos 116.000, no tienen esa comodidad.

En 2016 la cifra tiene una pequeña caída respecto del año anterior cuando era el 10,8%. La segunda privación más significativa es el que la vivienda no tiene calefón ni calentador instantáneo o similar. Eso abarca al 7,6% de los hogares (unos 88.000), más en el interior que en Montevideo, y creció levemente de un año a otro (antes era 7,2%).

Con porcentajes menores el relevamiento evidencia que hay un 4,6% de los hogares con hacinamiento, esto es, unos 53.500. La cifra casi se duplicó respecto del año anterior en que era 2,4%.

El informe también señala que el 4% carece de cocina (era 4,4%), 2,7% no tiene baño (era 3,2%), 2,1% no tiene agua potable (era 2,3%), 1,7% sin heladera (era 1,9%) y 0,2% sin energía eléctrica (era 0,3%).

Datos.

El último censo efectuado en Uruguay, en 2011, indicó que hay 252.400 viviendas desocupadas en el país, en las que no vive nadie.

De estas viviendas, el 53% son de uso temporal para fines de semana, vacaciones, etcétera. En Montevideo, ese porcentaje es un poco menor: alrededor del 20%.

En el país había entonces un 15% de viviendas desocupadas, pero que estaban en alquiler. En Montevideo, el porcentaje era un poco mayor; obviamente, aquí el mercado inmobiliario es mucho más dinámico: 29% o 30% de esas viviendas desocupadas estaban en alquiler.

Tiempo atrás un estudio de la Cátedra de Sociología Urbana de la Facultad de Arquitectura identificó la existencia de 133 hectáreas de suelo vacante en 26 barrios "intermedios" como ser Cordón, Aguada, Goes, La Comercial, Brazo Oriental, Arroyo Seco, Bella Vista y Capurro, entre otros.

La Intendencia de Montevideo creó el programa piloto Fincas abandonadas para implementar con carácter urgente medidas tendientes a la recuperación de inmuebles abandonados en el área central e intermedia de la ciudad.

El proyecto piloto está pensado para recuperar entre 20 y 30 inmuebles en los municipios B y C.

Proyecto para multar viviendas vacías.

El Partido Comunista presentó el año pasado un proyecto de ley para topear el precio de los alquileres y sancionar con multas económicas a los propietarios de viviendas desocupadas por más de seis meses.

El proyecto tiene 52 artículos y fue presentado por el diputado comunista Gerardo Núñez. Apunta a lograr "el ejercicio pleno del derecho a la vivienda", indica la fundamentación de motivos. Para eso, se plantea un tope al precio de los alquileres y otro a la actualización de los mismos.

Según se establece, el precio para los contratos de arrendamiento con destino casa-habitación celebrados a partir de la vigencia de la ley, no podrá superar anualmente el 4% del valor catastral del inmueble objeto del arrendamiento. A su vez, el reajuste del precio del arrendamiento no debe ser superior a la última variación registrada en el Índice Medio de Salarios.

En forma complementaria, se plantea la aplicación de una multa mensual de 0,04% del valor del catastro del inmueble "abandonado u ocioso". En tanto, a partir del quinto mes continuo de incumplimiento el propietario deberá abonar el doble (0,08%). A su vez, el monto se duplicará en caso de que el titular sea una persona física o jurídica con más de 10 viviendas declaradas como deshabitadas.

El proyecto define como vivienda ociosa o vacía a aquella que se encuentra deshabitada o no utilizada en forma permanente por el plazo máximo de seis meses continuos, que se encuentre dentro de la zona urbana, suburbana o "potencialmente urbanizable".

Este criterio se aplicaría con la excepción de los inmuebles que se encuentren en proceso de compra-venta, permuta, o cuando haya recientemente vencido un contrato de alquiler, o la vivienda fuera recién construida. Así como las propiedades que se encuentren en proceso de reciclaje, remodelación, o modificación, sean de uso de temporada o se ubiquen en un asentamiento.

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Foto: Darwin Borrelli.

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