La Universidad de la República planteará al Poder Ejecutivo la misma pretensión presupuestal que la solicitada en 2015. Si bien habrá un ajuste en base al crecimiento estimado del Producto Interno Bruto (PIB), que hace que la cifra represente el 91,5% de la solicitud original, en términos generales se mantendrá la propuesta.

El presidente Tabaré Vázquez reiteró que la Rendición de Cuentas que el Ejecutivo enviará al Parlamento el 30 de junio, tendrá efecto solo por un año.

Sin embargo, las autoridades de la UdelaR solicitarán $ 4.477 millones para 2018 y $ 3.582 para 2019, siempre a precios de 2017.

Los números apuntan a alcanzar el famoso 6% del PIB para la educación pública y un 1% para la innovación e investigación.

La propuesta que oficializará hoy el rector Roberto Markarian, y que fuera aprobada hace dos semanas en el Consejo Directivo Central, no incluye 50 millones de pesos asignados a la Secretaría Nacional de Deporte para fortalecer la formación de nivel terciario en Educación Física.

En el planteo se volverá a insistir en los cerca de US$ 11 millones para el Hospital de Clínicas, iniciativa que fue rechazada para el proyecto de Presupuesto de 2015 y que se enmarca en la remodelación del nosocomio universitario.

También habrá un reclamo por mayor cantidad de becas. La Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU) quiere que se llegue a unas 8.000 bonificaciones de $ 15 mil cada una. Se trata de una iniciativa que corre por fuera del Fondo de Solidaridad.

El aumento salarial que se planteará representa un 38% del total. Es una diferencia relevante frente a la ANEP, la que destina 85% de su presupuesto en retribuciones a funcionarios.

Para los funcionarios no docentes de UdelaR, en base a este esquema, se les solicitará un sueldo mínimo de diez BPC hacia 2019, por 40 horas de trabajo a la semana. A la fecha, esas 10 BPC son poco más de $ 36 mil.

Por más que el presidente Vázquez haya insistido con la idea de austeridad, la propuesta de UdelaR busca desafiar al Ejecutivo para conocer si realmente la educación es la primera prioridad.

Es que de lo planteado para el quinquenio en 2015, solo hubo un 13% de satisfacción.

PARTIDA PARA 2018 Y 2019