El vicepresidente volvió a hablar esta mañana de su gestión Ancap, de los vuelos del avión de Alur, de la polémica por el uso de la tarjeta corporativa:"No me quedo más callado", dijo.

El vicepresidente Raúl Sendic volvió a hablar esta mañana en el programa radial Intercambio de M24 sobre su gestión en Ancap y dijo que no se quedará más callado.

En la entrevista comenzó abordando las críticas sobre su gestión en la petrolera estatal y acusó a la oposición. “A poco de comenzar este período se empezó a instalar un relato de lo que había ocurrido en Ancap, incluso ese relato acompañado por algunos compañeros del gobierno”, dijo. “La oposición quiso instalar un escándalo del estilo Petrobras uruguayo”, aseguró Sendic, y aclaró que desde un principio él estuvo de acuerdo con crear la comisión investigadora. Pero algunas de estas investigadoras “se convierten en un verdadero circo” como pasó con la de Ancap, opinó.

El jerarca señaló que "a lo largo de estos dos años, a pesar de lo que se ha dicho de Ancap, no se ha encontrado ningún delito”, pero “ningún miembro de la oposición ha reconocido esto. Al contrario”, añadió, diciendo que han seguido alentado la idea de que hubo "delito" y "corrupción” en el ente.

"Cuando llegamos (a Ancap) las inversiones habían sido de US$ 12 millones y nosotros multiplicamos por 100 eso. No es fácil, tuvimos que pasar a un plan de inversiones” y ese plan “se hizo con endeudamiento. Quizá ese fue el error”, explicó Sendic. “Después termina el Estado capitalizando US$ 600 millones. El plan fue ambicioso y se hizo en poco tiempo (…) Se tendría que haber capitalizado la empresa antes y no después”, agregó.

Sendic sostuvo que "se desarrolló ese proceso. Si fue rápido, puede ser, quizás fue demasiado intenso en pocos años. Yo decidí poner el pie en el acelerador en ese momento porque no sabía cuánto tiempo íbamos a estar ahí. Pero eso contó siempre con el respaldo de la oposición, del presidente, del Ministerio de Economía".

“Ha sido una experiencia muy triste porque pensé que estar en la vicepresidencia iba a permitir un diálogo con la oposición”, sostuvo.

Y añadió: "No me quedo más callado. Tengo tranquilidad, no tengo necesidad de callar, pero hay elementos que están en la justicia y el día que sea convocado y vaya contestaré lo que sea necesario contestar. Estoy tranquilo con la forma en que bien involucionando el expediente en la Justicia”.

“Voy a tener un período de explicación y después me voy a dedicar hablar de temas políticos que verdaderamente le importan a la gente”, dijo.

Para el vicepresidente lo que está ocurriendo actualmente en Uruguay "es una ofensiva donde hoy vienen por mí, mañana por otros, hasta que nos dejen absolutamente descabezados en la izquierda".

"Quiero que mis compañeros sepan que esto es una estrategia que apunta contra el conjunto de la izquierda uruguaya”, dijo, y señaló que dentro del Frente Amplio hay quienes están de acuerdo y quienes no con ésto.

Uno de los capítulos del libro "Sendic, la carrera del hijo pródigo", recientemente lanzado a la venta, habla de los viajes del avión de Alur a San Fernando, Argentina, uno de los epicentros de la ruta del dinero K.

Al respecto, el vicepresidente dijo que “el aeropuerto de San Fernando es el aeropuerto de las aeronaves pequeñas. Las aeronaves pequeñas no pueden aterrizar ni en Aeroparque ni en Ezeiza”, dijo, y aclaró que “en un momento mandamos una carta para aterrizar en Aeroparque”, pero no fue posible. El de San Fernando “es un aeropuerto que lo utilizan todos los empresarios argentinos”.

Para Sendic “enlazar el avión de Alur con la ruta del dinero K es una cosa absolutamente increíble, solo porque se utilice el mismo aeropuerto”.

Sin embargo el vicepresidente no respondió el motivo de dichos viajes.

"No me he puesto a estudiarlo, pero no me llama la atención la cantidad de vuelos porque en realidad el avión se usaba con frecuencia. Fui algunas veces a Buenos Aires, lo usé algunas veces para ir a Bella Unión, pero lo que más usé cuando estuve en Ancap fue el auto. El auto lo dejé con más de 300.000 kilómetros, porque estaba visitando permanentemente las plantas del interior".

El jerarca dijo que no se arrepiente de haber comprado el avión: "Lo volvería a comprar. Vale menos que una de las cortadoras de caña. Es un capital", dijo.

En relación al hecho de llevar a la Justicia a las autoras del libro, las periodistas Patricia Madrid y Viviana Ruggiero, Sendic dijo que tuvo “la opción de ir por un mecanismo de impedir la salida del libro, un recurso de amparo, porque es una biografía no autorizada. Pero no me gusta eso, no me gustaba. Iba a ser interpretado como algo que yo no quería que se publicara”.

“Hay que defender la honra de las personas, el honor, todo eso se daña. No porque seas periodista tener derecho a hacer cualquier cosa y sembrar cualquier tipo de duda”, dijo.

En relación al polémico uso de la tarjeta corporativa de Ancap, Sendic insistió en que la misma se utilizó solamente “para cubrir necesidades en las que el viático no era suficiente, para adquirir obsequios o presentes que tuviera que ver con la función.No voy a entrar en detalles pero tengo la tranquilidad de que se usó para eso”.

“Las tarjeta la usaron todos los directores, pero está de moda darle palo a Sendic”, dijo.

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