Aseis días de haber asumido el ministro Eduardo Bonomi y a cuatro de que el Ministerio del Interior anunció el nuevo sistema de patrullaje en Montevideo, policías de las Unidades de Respuesta Rápida de la zona costera de la capital se negaron ayer a salir de recorrida, disconformes con los cambios de horarios de los relevos.

La medida colectiva, que afectó el inicio de los turnos matutino y vespertino de las Unidades de Respuesta de la Policía de Montevideo (URPM) de la Zona II, trastornó el patrullaje de barrios como Pocitos, Malvín, Buceo y Carrasco, entre otros.

"En un principio (de los turnos) ellos plantearon en forma colectiva los problemas que podían tener con los cambios de horarios de los relevos. Yo les dije (a los policías de las unidades de patrullaje) que debían efectuar planteos individuales y no colectivos. Y menos en la entrada de los turnos", dijo a El País el jefe de Policía de Montevideo, Mario Layera.

Enseguida agregó: "En la entrada de los turnos, ellos tuvieron la intención de tomar una medida colectiva. Consistió en que se juntaron todos y plantearon sus reclamos".

Según Layera, una medida colectiva podría catalogarse como "un abandono del cargo" en el marco de una situación compleja en materia de seguridad. "Las Unidades de Respuesta Rápida de la Policía de Montevideo atienden la emergencia de toda la ciudad. Si no tenemos URPM, Montevideo queda descubierta ante la emergencia. Todo eso constituye un delito para ellos", expresó.

La movilización en el inicio de los turnos matutino y vespertino de la Zona II fue levantada luego que Layera se dirigiera a la sede de esa repartición policial ubicada en Avenida Italia y Bolivia a hablar con los agentes movilizados.

En la reunión, el jerarca trasmitió a los policías que Montevideo se encontraba en una situación de "emergencia" en materia de seguridad y que los efectivos "no podían adoptar medidas gremiales", ya que estaban impedidos de realizar paros o iniciar una huelga.

Los efectivos de los patrullajes se quejaron ante Layera de que los cambios del horario de los relevos —antes se efectuaban a las 6 de la mañana y ahora a las 8— afectaban sus vidas porque les impedía realizar el Servicio 222. Es decir, ven amenazados sus ingresos.

El jerarca policial replicó que cada uno de los policías de los turnos matutino y vespertino de la Zona II debían plantear las situaciones que "los complicaba" y agregó que el Comando les solucionaría "los problemas si estos eran reales". También señaló que los horarios de los relevos "no iban a ser cambiados" porque no fueron dispuestos por "un capricho" del Comando de la Jefatura de Montevideo sino para enfrentar a los delincuentes.

Layera dijo a El País que el cambio de horario de los relevos de las patrullas fue una orden firmada por él y que se trató de una resolución que fue estudiada por el Comando de la Jefatura de Montevideo en los últimos 15 días. "Se adoptó esa orden debido al desplazamiento que hay del delito en los horarios de los relevos" de las unidades de patrullaje rápido, dijo Layera.

El antiguo horario de los relevos de la Zona II se efectuaba de la siguiente manera: el primer turno era de 6 a 14 horas, el segundo turno de 14 a 22 horas, y el tercer turno de 22 a 6 de la mañana. Ahora el primer turno se hará entre las 8 y las 16 horas, el segundo entre las 16 y las 0 horas, y el tercero entre las 0 y las 8 de la mañana del día siguiente.

Días atrás, Layera reunió a comandos y mandos medios de las cuatro zonas de la Jefatura de Montevideo para solicitarles un mayor compromiso y advertirles que la gestión de todas las unidades de la Policía capitalina se medirán en función de resultados y metas.

Participantes del encuentro dijeron a El País que Layera expresó que el Comando obtuvo mejores remuneraciones para todos los policías, equipamiento de última tecnología y refacciones edilicias de todas las seccionales. "Ahora es momento de aplicar la disciplina operativa en beneficio de los ciudadanos", dijo Layera.

El Comando de la Jefatura de Montevideo también cambió los horarios de los subcomisarios. Durante décadas, los subcomisarios trabajaban 24 horas y descansaban 48 horas. En los próximos días trabajarán cinco días a la semana y descansarán uno y con horarios de ocho horas. Es decir, cada seis semanas les tocará un domingo como día de descanso.

Por esa causa, los cambios generaron malestar en los mandos medios policiales, quienes realizaban otras actividades durante los días libres que tenían durante la semana.

Según fuentes del Ministerio del Interior, los subcomisarios dormían mientras estaban de guardia y cuando un ciudadano pedía hablar con uno de ellos, se le decía que este estaba descansando. "En la práctica, el subcomisario no está las 24 horas al frente de una comisaría. Con el nuevo régimen horario, siempre habrá un subcomisario atendiendo una comisaría", dijo la fuente ministerial. Enseguida agregó: "El cambio de horarios de los subcomisarios es una medida legal y mejora el servicio en beneficio de la comunidad". La intención del Comando es que los subcomisarios realicen el mismo horario de ocho horas que hacen las unidades policiales de patrullaje.

Jefe capitalino debió intervenir para desarticular medida