Ya pasó por una situación similar cuando debió presidir el Hipotecario.

Si hay algo que destacan los que conocen a Jorge Andrés Polgar Pisano es su capacidad de "liderar" equipos, lo hizo cuando asumió como presidente en el Banco Hipotecario (BHU) —en mayo de 2008— luego que las dificultades para implementar la reforma del sistema de vivienda que en el primer gobierno del Frente Amplio (FA) se había "tragado" al directorio de la institución y a jerarcas del Ministerio de Vivienda en dos años.

Esa cualidad será clave cuando asuma como presidente del Banco República (BROU). Su actual presidente, Julio César Porteiro deja la institución con una interna complicada con las directoras Sylvia Naveiro y Adriana Rodríguez (cuya continuidad está en duda), además de resistencias internas en gerentes que veían a Porteiro más preocupado por el recorte de gastos y ahorros que por impulsar al banco a dar un salto hacia el futuro. Ayer, el aún presidente negó esas diferencias (ver aparte).

Polgar es considerado un "polifuncional" en el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) porque ha estado involucrado en varios temas complicados. En 2005 cuando el Frente Amplio (FA) asumió por primera vez el gobierno, pasó de la Superintendencia de Servicios Financieros del Banco Central (BCU) al MEF, donde fue uno de los puntales de la reforma del sistema de vivienda que consistió en la creación de la Agencia Nacional de Vivienda —brazo ejecutor de la política en la materia— y la reestructura del BHU, que desde la crisis de 2002 no daba créditos y estaba técnicamente quebrado.

Asumió como presidente del BHU para encauzar su reestructura y tuvo disputas con el sindicato bancario (AEBU) por el pasaje de funcionarios a la Agencia de Vivienda, de las que salió airoso. El BHU volvió a dar créditos, salió a captar ahorros, dejó de construir viviendas y hoy es el banco que tiene mayor participación en el mercado de préstamos hipotecarios. En septiembre de 2011 volvió al MEF porque así lo había acordado con el entonces ministro, Fernando Lorenzo. Allí se encargó de la negociación de los acuerdos de intercambio de información tributaria con Argentina y Brasil y también junto a Martín Vallcorba, del proceso de inclusión financiera (que incluye la obligatoriedad de pagar el sueldo por vía bancaria o dinero electrónico).

Tras la salida de Lorenzo por el affaire Pluna, Polgar asumió como subsecretario de Economía el 26 de diciembre de 2013 por pedido de su amigo Mario Bergara (actual presidente del Banco Central), que asumió como ministro.

Con Bergara se conocen prácticamente de memoria. Desde la militancia en la Unión de la Juventud Comunista del Uruguay —de la que se distanciaron luego— y del trabajo juntos en el BCU, donde Pol-gar llegó a ser jefe del Departamento de Estudios de la Superintendencia de Servicios Financieros.

Políticamente, Polgar es cercano a Asamblea Uruguay, si bien no es un "orgánico", dijeron algunas fuentes. De hecho, tiene buena sintonía con el ministro de Economía, Danilo Astori, quien en el tercer gobierno del FA le pidió que fuera vicepresidente del BROU.

Los que lo conocen, dicen que prefería estar en el MEF que en el República pero no rehúye a las dificultades y por eso dan como un hecho que asumirá como presidente del BROU cuando Porteiro deje el cargo.

Polgar es economista por la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración de la Universidad de la República (UdelaR) y tiene un doctorado en Economía por la Georgetown University.

Con 48 años de edad, está casado, tiene dos hijos, es hincha de Peñarol y del club Tabaré y es seguidor del carnaval.

En la campaña electoral de 2014, Jorge Polgar era viceministro de Economía, y aceptó el desafío del entonces candidato nacionalista Luis Lacalle Pou y realizó la proeza física de la "bandera" frente a la Plaza del Entrevero, a pocos metros de la sede ministerial. "Decile a (Tabaré) Vázquez que lo espero ahí", había dicho Lacalle Pou en Cardona, cuando hizo "la bandera". La foto de Polgar estaba incluida en un Power Point que presentó el exministro de Economía, Mario Bergara, en un encuentro de las Redes Frenteamplistas.

Ayer martes, el presidente del BROU, Julio César Porteiro, dijo en una conferencia de prensa que el anuncio de su renuncia el lunes no se refería a una desvinculación inmediata. "No renuncié al banco, yo anuncié que iba a renunciar", dijo el jerarca, para más adelante indicar que "en función de cómo se den los acontecimientos" dará la fecha de su retiro. Además, negó diferencias con las dos directoras que responden al MPP, Sylvia Naveiro y Adriana Rodríguez.

Porteiro dijo que, cuando en abril de 2014 asumió el cargo, aceptó porque "el presidente (José Mujica) y el vicepresidente (Danilo Astori) entendieron que mi nombre podía ser la solución para manejar el banco", aunque aseguró que su presencia "sería transitoria". Explicó que al momento de asumir planteó lo que definió como "Visión BROU 2020", que consiste en un plan a largo plazo para un cambio institucional del banco. "Propusimos cambiar el modelo de negocios del banco, el modelo de atención, hacer un esfuerzo para racionalizar los costos, que tendría una ejecución que iba a demandar un largo período de tiempo".

"Mi sueño es que nada de mi desvinculación genere distorsiones. Quiero al banco centrado en sus responsabilidades", sostuvo Porteiro, y anunció que el 20 de mayo es la fecha que maneja para su retiro, porque el 23 viaja a España con su señora y sus hijas. Si a ese día no se dieron las condiciones para su retiro, el 7 de junio estará de vuelta en el cargo.

FUTURO PRESIDENTE DEL BANCO REPÚBLICA