La pareja asesinada el sábado, en Solymar, provenía de las dos zonas de Paraguay que se disputan el mercado de la marihuana.

Ramón Quevedo Arce (45) nació en Capitán Bado y luego se fue a vivir a Pedro Juan Caballero. Ambas localidades pertenecen al departamento de Amambay, donde se cultiva el 80% del cannabis. Su esposa Claudia Guerrero (40) era de Caazapá, una ciudad de 30 mil habitantes que fue el epicentro de una organización de narcotráfico desbaratada en Uruguay, hace dos años.

La marihuana que circula en el mercado ilegal uruguayo no tiene código de barras ni ninguna etiqueta que diga "made in Paraguay". Sin embargo, "más del 90%" de la droga de este tipo que circula en el país proviene de esa zona de Sudamérica, dijo a El País Carlos Inzaurralde, subdirector de Represión del Tráfico Ilícito de Drogas.

El año pasado se batió el récord de ingreso de marihuana al país. La Policía incautó 2.521 kilos de esta droga, cuando en 2014 habían sido 1.457 kilos. La sustancia, en forma de ladrillo, entra a Uruguay por todo tipo de vías. La tendencia es encubrir el cargamento en vehículos de turistas, sobre todo en camionetas o autos de alta gama. Tanto la frontera con Brasil como los puentes que conectan a Argentina son focos de pasaje, explica Inzaurralde. La otra opción son "avionetas que tiran el equipaje en el interior y se dan a la fuga".

Los investigadores locales especulan que la droga que circula es de origen paraguayo por las declaraciones de los detenidos en los operativos. A pesar de esto y hasta el momento la Policía no estaba realizando estudios de trazabilidad de estupefacientes. "Recién ahora el área científica está dotada para dar cuenta de las propiedades de cada sustancia", señaló el subdirector. Lo curioso es que la droga proviene de un país (Paraguay) donde el cultivo es ilegal.

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Paraguay es el mayor productor de cannabis en la región y el segundo mayor del mundo, solo superado por el hachís asiático. La policía paraguaya incauta cada año unos 18 millones de plantas de marihuana, equivalentes a unas 400 toneladas. En pequeños pueblos, como Kamba Rembe, estiman que nueve de cada 10 pobladores trabajan en el cultivo de esta droga.

Hay campesinos que cambian marihuana por carne. Estos productos valen lo mismo: 20.000 guaraníes el kilo o US$ 4. Así las cosas, muchos cultivos clásicos fueron sustituidos por cannabis. Las plantaciones ocupan unas 7.000 hectáreas y sirven para exportar unas 20 mil toneladas. En Uruguay se vende a unos US$ 1.000 el kilo.

Caazapá, la ciudad de donde provenía la mujer paraguaya asesinada en Solymar, adquirió su fama hace dos años, cuando fue detenido en Uruguay Juan Domingo Viveros Cartes (68), tío del presidente paraguayo Horacio Cartes. Fue entonces que la Policía desbarató una banda de narcotraficantes con sede en aquella localidad del sur de Paraguay.

Vivero Cartes cayó en Durazno el 30 de julio de 2013. Tres meses después se pudo comprobar su conexión con un cargamento de 450 kilos de marihuana. El tío del presidente paraguayo había sido procesado con prisión, en primera instancia, por haber violado el Código Aeronáutico. Piloteaba un avión bimotor que los radares de la Fuerza Aérea detectaron cerca del Cebollatí, en Rocha. Los militares uruguayos obligaron a que la aeronave aterrizara en Durazno, donde el piloto fue detenido, por más que entonces no se encontró un solo gramo de droga. La había arrojado horas antes en Lavalleja.

El nudo de la investigación se desarmó cuando la Policía detuvo a Sebastián Marset (22), quien manejaba un lujoso auto por la ruta 1. El joven portaba 173 kilos de marihuana y confesó su conexión con Vivero Cartes. Junto a la operación que hizo caer al familiar del "hombre más rico de Paraguay", también fueron señalados, aunque no detenidos, dos paraguayos vinculados al gobernante Partido Colorado. La mezcla entre narcotráfico y política es una de las mayores trabas que tiene la Policía uruguaya a la hora de investigar la ruta de la marihuana, dijo una fuente de la brigada Antidrogas.

Omar Clavijo y su reino cayeron en 2003, en Paraguay, con siete balazos, en lo que se estima fue un ajuste de cuentas. Años atrás, el narcotraficante uruguayo había sido detenido y llevado a la cárcel de Salto, de donde escapó en octubre de 2002. Poco antes de ser asesinado, las autoridades paraguayas habían incautado 17 toneladas de marihuana que se presume estaban bajo su cargo, según publicó la prensa.

A Maurilio Martínez le decían Lilo, por su apellido, y Don Carmelo por su zona de influencia. El periodista Antonio Ladra asegura que este coloniense asesinado en abril de 1999 fue el primer narco uruguayo con perspectivas internacionales.

Aquel enero de 2012, Washington "Bocha" Ri- sotto recibió 11 balazos cuando salió de un almacén, en el Barrio Sur. Este contratista de fútbol, hombre de boxeo y amante de otros deportes, tenía nexos con narcotraficantes y con los cheques falsos que le hicieron firmar a Susana Giménez en 2009. A las 22.20 horas de aquel lunes de enero de 2012, los asesinos le gritaron: "¡Llegó tu hora!".

Más del 90% de la droga tiene su origen en ese país