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Nueva planta de UPM pone a prueba controles ambientales

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Desarrollo de la industria de la madera cambió buena parte del paisaje del interior. Foto:A. Colmegna
CAMION CARGADO DE LEÑA, FORESTACION , FOTO ARIEL COLMEGNA 20060929 ROLOS DE MADERA, TRONCOS, HOMBRES TRABAJANDO
COLMEGNA

El gobierno debe definir si lo hace la Dinama o la Secretaría de Presidencia.

El anuncio de que UPM construirá una nueva planta procesadora de celulosa en Uruguay (la segunda de la empresa finlandesa y la tercera de su tipo en el país) pone nuevamente a prueba la capacidad del Estado para vigilar el impacto ambiental de grandes proyectos industriales.

La Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama), que depende del Ministerio de Vivienda y Medio Ambiente, ya tiene experiencia en la materia porque está controlando tanto a la primera planta de UPM en Fray Bentos como a la de Montes del Plata en Conchillas, Colonia. La duda es si la tarea estará a cargo de la Dinama o si tendrá algún rol la flamante Secretaría Nacional de Ambiente, Agua y Cambio Climático.

La interrogante la generó hace algunos días la ministra de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Eneida de León, que dijo que "la secretaría de Medio Ambiente y el gabinete ambiental van a estar más ocupados con eso (con los reclamos de sectores ambientalistas argentinos contra la nueva planta de celulosa) así que no es tema de mi cartera".

Esto pese a que el director de la Dinama, Alejandro Nario, se adelantó a decir que no cree que la nueva fábrica de UPM vaya a generar problemas ambientales porque la primera no los produjo y la futura instalación será más aún avanzada tecnológicamente.

En la flamante Secretaría Nacional de Ambiente, Agua y Cambio Climático dicen que el punto de qué organismo estará a cargo de los controles no está definido. La creación de la Secretaría fue muy cuestionada por la oposición porque no está previsto que sea sujeta al control parlamentario, ya que depende directamente de la Presidencia de la República.

La Secretaría funciona en el cuarto piso del edificio Caubarrere, sobre 18 de Julio, a dos cuadras de Plaza Independencia. Carlos Colacce, expresidente de OSE y exministro de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, fue nombrado al frente del nuevo organismo que actualmente cuenta con un equipo de seis personas incluyéndolo a él.

Colacce dijo a El País que no tiene información de cómo se va a distribuir este trabajo. "La decisión se tomará al más alto nivel y no tenemos instrucciones", explicó.

"Somos un equipo chiquito, que se va a reforzar y que tendrá funcionarios en comisión que todavía no están a disposición total. Estamos con mucho entusiasmo pero todavía a media máquina", agregó Colacce.

El funcionario confía en que en un mes la oficina esté trabajando a pleno. "Nosotros no vamos a laudar sino que vamos a indicar cómo actuar y cómo solucionar problemas", señaló.

Advertencias.

Por ahora la Secretaría está embarcada en lo que denomina un Proceso de Construcción de la Política Nacional de Cambio Climático, para lo cual ha realizado talleres y reuniones de trabajo.

La Secretaría ya detectó que "no se puede seguir ignorando la ausencia de políticas energéticas y sociales en el transporte", que "no se enseña el clima en Uruguay" y que "hubo aumento de precipitaciones y temperatura", de acuerdo a un memorándum con algunas conclusiones al que accedió El País.

También se detectó que "las personas localizadas en zonas de riesgo se ven cada vez más afectadas por las inundaciones; la no aplicación de las normativas de ordenamiento territorial y su fiscalización contribuyen en este proceso".

"Los impactos de la variabilidad y el cambio climático son desiguales sobre distintos sectores de población y diferentes actividades productivas. Los efectos son mayores sobre aquella población ya vulnerable a otros factores (no exclusivamente climáticos) y sobre los sectores y sistemas productivos menos preparados o que se apoyan en ecosistemas menos resilientes", señala.

La Secretaría entiende que "todavía hay deficiencias, como ser fallas en el registro de algunos eventos climáticos y de evaluación de los impactos".

"Existen en Uruguay eventos climáticos extremos, olas de calor, vientos fuertes, tornados, sequías, inundaciones y heladas fuera de época. Hay percepción de que estos eventos extremos son más frecuentes, en parte explicada por una mayor visibilidad de la sociedad sobre los mismos y sus efectos. No hay evidencia sobre si efectivamente son más recurrentes estos fenómenos. En el caso de las sequías se destaca la incertidumbre sobre este fenómeno debido a la falta de datos e información sistematiza suficiente", sostiene el trabajo.

"Hay evidencia sobre el aumento de la temperatura y de las lluvias", dice el borrador, que también advierte por la falta de integración de datos vinculados a la información meteorológica, hidrometeorológica y climática" lo que lleva a que no haya sistemas de alerta temprana.

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Desarrollo de la industria de la madera cambió buena parte del paisaje del interior. Foto:A. Colmegna

EL DESARROLLO INDUSTRIAL Y EL MEDIO AMBIENTE

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