Ya había intentado suicidarse; la debían vigilar por cámaras.

Una mujer de 21 años se ahorcó con su propia ropa en una sala de máxima seguridad del Hospital Vilardebó. El hecho sucedió el pasado 20 de enero. La joven era vigilada por cámaras de seguridad y ahora hay una investigación administrativa que pretende dilucidar por qué el personal del centro de salud no llegó a tiempo para salvarla.

La paciente, según contó a El País el director de Salud Mental de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE), Horacio Porciúncula, ya había tenido varios intentos de suicidio.

Estaba en el área reservada de la sala 16, la de mujeres, la cual está conformada por cuatro camas y es, supuestamente, de máxima seguridad. Sin embargo ahí no se cuenta con custodia y la vigilancia se hace a través de cámaras de video.

Tras lo sucedido, según dijo Porciúncula, el Hospital Vilardebó decidió cerrar ese sector del centro.

Los hechos sucedieron en horas de la tarde y a la noche el cuerpo fue retirado por el instituto técnico forense.

"Está todo filmado. Lo vieron en la cámara pero aparentemente llegaron tarde. Lo que estamos viendo ahora es justamente si los tiempos de respuesta fueron los estrictamente pertinentes", declaró el director de Salud Mental.

La paciente había ingresado en 2013 derivada desde el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) y padecía trastornos conductuales severos.

El diputado colorado Daniel Bianchi hizo un pedido de informes al Ministerio de Salud Pública (MSP), donde solicitó que se aclare la situación. "Se solicita se nos informe si de la filmación surgen las circunstancias en que se desarrollaron los hechos y si pudo haberse evitado la muerte de la joven, de haber mediado una actuación oportuna por parte del personal a cargo de la Sala", reclamó en el documento.

El diputado colorado también pidió saber "qué personal cubría el turno en que ocurrieron los hechos (tanto personal médico, como de enfermería y de vigilancia) y si efectivamente se encontraban en sus puestos de trabajo en el momento" en que la paciente se ahorcó.

"En caso de haber tenido autorización para retirarse de su lugar de trabajo, quién lo autorizó y si el puesto de vigilancia quedó descubierto", continúa el documento que la cartera deberá trasladar a ASSE.

Bianchi también reclamó saber "si existe protocolo de prevención para estos hechos y en su caso cuál fue la falla y acciones que se dispusieron para evitar la reiteración de una muerte tan lamentable".

Uruguay mantiene un nivel alto, aunque estabilizado, de suicidios. Actualmente, de todas formas, el número está un poco encima de la media internacional, que es de 11,4 autoeliminaciones por cada 100.000 personas y se ubica en 17,4 cada 100.000, de acuerdo con datos oficiales del año 2014.

Realizan investigaciónD. ISGLEAS / C. TAPIA