Durante toda una noche, el Módulo 1 del Comcar permaneció sin guardia policial, debido a falta de personal, según informaron ayer fuentes vinculadas al citado complejo carcelario.

Las fuentes consignaron que el hecho se produjo en una noche del mes de febrero, por orden de un superior, quien envió a los dos guardias asignados a ese lugar a otro módulo, "porque allí faltaban policías".

Los guardias, un agente y un suboficial Mayor, acataron la orden del oficial superior, aunque el subordinado de mayor rango, un policía con varios años dentro del Comcar, dijo que iba a dejar asentada esa situación en el libro de guardia del Módulo 1.

Con esa constancia, una delegación de uno de los sindicatos policiales, realizó una denuncia en asuntos internos del Ministerio del Interior, que por estos días analiza la situación.

Según explicaron fuentes allegadas al Comcar, en el módulo en cuestión, se alojan unos 600 reclusos, que tienen vía libre de ingreso a todas las celdas, ya que las paredes de las mismas están boqueteadas.

"Rompieron todas las paredes e hicieron boquetes para poder entrar y salir de las celdas. El policía que entra allí no sabe con que se puede encontrar", dijeron informantes policiales a El País.

En ese módulo, se alojan principalmente violadores y policías, pero en los últimos tiempos y por falta de lugar en los otros módulos también se están alojando a rapiñeros y presos con VIH.

En cuanto a los boquetes, este módulo no es el único en el que se da esta situación. Los informantes cuentan que en todos los módulos 1, 2, 3, 4, y 5 las celdas están conectadas por un boquete. "Esto facilita el riesgo de motín, sobre todo en los módulos donde están los reclusos con mayor peligrosidad", afirmaron.

De cualquier manera, los efectivos policiales afectados a este servicio, denuncian que ninguno de los módulos cuenta con el mínimo de policías para controlar a la gran población reclusa que tiene el Comcar.

La dirigente del Sifpom, Patricia Rodríguez, manifestó que las condiciones de trabajo en las cárceles, fue uno de los temas que se trataron ayer con el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, durante el consejo celebrado en Maldonado. Para Rodríguez, "es una señal positiva" que Bonomi los haya atendido cuando en los cinco años del anterior gobierno los recibió "solo una vez".

Por una noche no hubo quien vigilara a unos 600 reclusos