De acuerdo a estimaciones de operadores turísticos locales, los alojamientos de los centros termales y de la ciudad trabajarán a full entre el jueves y el domingo de Semana Santa.

En Termas del Arapey, los alojamientos propiedad de la Intendencia fueron colocados en forma anticipada, mientras que en la zona de camping las pocas parcelas aún disponibles terminarán de ocuparse hacia el martes o miércoles. Los operadores privados son optimistas en cuanto a que la ocupación rondará el 90% entre mañana sábado y el miércoles, llegando al 100% desde el jueves y hasta el domingo 16.

"Las reservas han sido buenas y con mayor antelación a las del año pasado; podemos decir que para los cuatro últimos días de la semana entrante ya no disponemos de alojamiento por la demanda que se originó", dijo Andrés Zanatta, gerente del Hotel Arapey.

En Termas de Daymán, los empresarios aguardan también que al promediar la semana próxima estaría colmada la capacidad hotelera, cercana a 4.000 camas.

Beatriz Antelo, responsable del Hotel Solar del Acuario, dijo a El País que ya este fin de semana la ocupación llegará a un 80% y desde el jueves al 100%.

En materia de seguridad, en las últimas horas de ayer el Comando de Jefatura de Policía se reunió con representantes de la Intendencia, del Centro Comercial, la Aduana y la Liga de Fomento de Arapey para ajustar detalles del operativo que se implementará en el centro turístico, como igualmente se hará en Daymán.

Se pretende en todo caso que no se reiteren en los campings y alrededores situaciones conflictivas debidas a los excesos en el consumo de alcohol de parte de jóvenes, quienes terminan promoviendo desórdenes y afectando la convivencia con grupos de familias de mayores. La policía ya anunció a los responsables de la vigilancia de los campings que no permitirá ningún tipo de desmanes.

La Aduana por su parte establecerá en el ingreso a los predios un puesto fijo de control y decomiso de bebidas alcohólicas que se pretenda ingresar de contrabando desde la frontera con Brasil, como aconteció durante el pasado Carnaval de Arapey, cuando hasta el intendente Andrés Lima fue agredido por un muchacho alcoholizado que le tiró un vaso de cerveza en la cara.

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